El estoicismo reconoce que el hombre debe de adaptarse constantemente y para ello debe de aprender. No puede quedarse siendo igual.

Si vemos el dinero como el tiempo invertido en una actividad determinada, podríamos tener una mayor precaución al utilizarlo.

Dentro de los fallos más recientes respecto a una empresa que se vuelve pública están GoPro y Snapchat.En el proceso de volverse pública —convertirse en un IPO—, Snapchat tenía los argumentos suficientes para creer que estaba en un momento de crecimiento.

Recientemente me encontré con un texto del escritor colombiano Gabriel García Márquez en el que describía el proceso de escritura de su libro Cien años de soledad. Leyendo el texto, me di cuenta de que la historia de García Márquez tenía varios matices en común con un emprendedor.

De los grandes negocios actuales basados en innovación, su gran mayoría se basa en una pregunta: ¿Cómo puedo mejorar esto? Tim Ferris, escritor de La semana de 4 horas, se preguntaba cuánto tiempo tuvo que pasar hasta que a alguien se le ocurriera colocarle unas ruedas rotativas para facilitar el transporte del equipaje. La innovación no está en ver cuál es la siguiente corriente, sino en cómo hacer un producto más accesible. Recientemente estuve aprendiendo sobre August Dvorak. Él se preguntó si el teclado que utilizaban las máquinas de escribir y las computadoras actuales era la forma más eficiente para mecanografía. El teclado que utilizamos, llamado QWERTY, por las primeras letras, fue elaborado con un solo propósito: prevenir que la máquina de escribir se trabara.Dvorak propuso un teclado basado en la optimización de la escritura. Utilizando la forma del teclado Dvorak se reducen de manera significativa los problemas de la muñeca causadas por la posición y el movimiento de los dedos, además de proporcionar una velocidad al menos tres veces más rápida. Esto muestra que el cuestionar cómo hacemos nuestras actividades puede llevar a una mayor innovación que tratar de cambiar el mercado. Twitter:@MauricioGarita