La facturación del club, campeón de la Liga y la Copa españolas y de la Liga de Campeones en 2015, pasó de 530 millones de euros a 608 millones (+15%) pero sus beneficios cayeron un 36,5% de 41 millones de euros a 15 millones.
Este retroceso se debe precisamente a los éxitos obtenidos por el primer equipo de futbol, que supusieron un gasto extra en las bonificaciones de los jugadores, y también a la sanción promulgada por la Fifa de un año sin inscribir nuevos futbolistas por incumplir la normativa de traspasos de menores.
Esta prohibición, que entró en vigor en enero de 2015, forzó al club a anticipar numerosas incorporaciones en el verano de boreal de 2014 fichando a jugadores como el uruguayo Luis Suárez, el croata Ivan Rakitic, el alemán Marc André Ter Stegen o el chileno Claudio Bravo, entre otros.
“Por la sanción de la Fifa tuvimos que fichar esta temporada el doble de lo que estábamos acostumbrados”, señaló Monje.
Por el mismo motivo, la deuda del club aumentó de 287 millones de euros a 328 millones, por lo que la directiva anticipó “una situación de prudencia económica para la próxima temporada”.
Aun así, se mostró convencida de que “el club podrá acometer nuevos fichajes” si lo reclama el entrenador Luis Enrique Martínez y “podrá permitirse aumentar el salario de los jugadores” en referencia al caso del astro brasileño Neymar con quien están negociando una mejora de su contrato.
Para la próxima temporada, el club pronostica un beneficio de 20 millones de euros y una facturación de 633 millones en su mayor parte procedentes del área de marketing, por la que apostaron fuerte en los últimos años con nuevos contratos de patrocinio especialmente en Asia y América.
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