Además, se establece que para los trabajadores inscritos antes del 1 de enero del 2011 se mantiene la edad de retiro en 60 años, pero la cantidad de cuotas al IGSS aumentará de manera escalonada.
Según los requisitos que rigen hasta hoy, los afiliados debían aportar 180 cuotas —15 años—, en forma general.
Sin embargo, para quienes pidan su pensión a partir del 1 de enero del 2011, ese requisito aumenta a 192 cuotas —16 años—.
Quienes lo soliciten a partir de enero del 2013, las aportaciones se incrementan a 204 —17 años—, y a partir de enero del 2014 serán necesarias 216 cuotas —18 años—.
Arnoldo Aval, gerente del IGSS, explicó ayer que los cambios obedecen a la necesidad de darle sostenibilidad al IVS y que se consensuaron con diversos sectores —laboral y patronal—.
Sin embargo, el funcionario no brindó los datos o proyecciones de cuál será el impacto para mejorar las finanzas del IVS.
Mario Illescas, ministro de Trabajo, indicó que para aprobar los cambios, el Ejecutivo se basó en estudios actuariales y estadísticas de esa institución.
Carlos Rosenberg, subgerente de Prestaciones Pecuniarias del IGSS, argumentó que el 80 por ciento de personas que se pensionan han pagado más de 200 contribuciones, por lo que, según él, los cambios no afectarán a los trabajadores.
Aval agregó que muchos deciden no retirarse, sino seguir laborando y devengar un sueldo; además, que las leyes le permiten a un pensionado de la iniciativa privada y municipalidades seguir trabajando, a diferencia de las instituciones estatales.
Los efectos
Los afiliados percibirán los efectos según su edad y las cuotas que hayan aportado al IGSS.
Una persona más joven puede sumar con los años el número de cuotas requeridas, pero expertos comentaron que hay poca estabilidad laboral, y que en el país se acostumbran formas de pago que no incluyen el IGSS, mientras que una persona que está a punto de retirarse corre el riesgo de tener que trabajar por más años.
Es decir, si una persona que tiene 60 años y alcanzó 180 cuotas en diciembre del 2010 y desea retirarse, deberá trabajar y aportar un año más, por lo que se pensionaría a los 61 años.
Sin embargo, una persona que cumple 60 años en el 2013 y para ese año solo ha pagado 180 cuotas —como se requería en la actualidad— deberá trabajar dos años más, y si cumple 60 años en el 2014, tendrá que laborar hasta los 63 años, porque necesitará 36 contribuciones más.