Capturan a guardias del Sistema Penitenciario. Habrían asesinado al director de El Infiernito

La investigación realizada por la Fiscalía de Delitos contra la Vida del Ministerio Público, permitió que se realizaran diligencia de allanamiento en donde fueron capturadas tres guardias del Sistema Penitenciario (SP) presuntamente involucradas en la muerte violenta de José María Pérez  Corado, Director de la cárcel de máxima seguridad conocida como “El Infiernito”.

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La investigación realizada por la Fiscalía de Delitos contra la Vida del Ministerio Público (MP), permitió que se realizaran diligencia de allanamiento en donde fueron capturadas  tres personas presuntamente involucradas en la muerte violenta de José María Pérez  Corado, Director de la cárcel de máxima seguridad conocida como “El Infiernito”. Pérez Coronado fue asesinado en el parque central de la cabecera departamental de Escuintla el 22 de abril del presente año.

Guardias obedecían a pandilleros del barrio 18

Las diversas pesquisas realizadas por la Fiscalía permitieron la identificación del pandillero Ernesto Alonzo Luarca Quezada alias Slapy, quien actualmente guarda prisión en dicha prisión, como uno de los principales sospechosos contra quien se giró una orden de captura.

Asimismo fueron detenidos Ludvin Danilo Quiñonez y Julia Verónica Cifuentes Velásquez, agentes del Sistema Penitenciario, quienes se presume coordinaron con los integrantes de la pandilla criminal del barrio 18 para darle muerte a la víctima. También fue detenida Lluvia Emilia Vega Alay, guardia del Sistema Penitenciario.

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Luarca Quezada y Quiñonez con sindicados por los delitos de asociación ilícita y asesinato; Cifuentes Velásquez por asesinato, asociación ilícita y conspiración para cometer asesinato; mientras que Vega Alay es señalada por los delitos de conspiración para cometer asesinato y asociación ilícita.

De acuerdo con las investigaciones  de la Fiscalía el móvil del crimen de Pérez Corado habría sido porque la víctima no permitió privilegios a los reclusos de ese centro carcelario, razón por la cual integrantes de la pandilla del barrio 18 habían planificado y ordenado darle muerte.