Desde este miércoles decenas de personas han salido a las calles para oponerse a las medidas anunciadas por el gobierno de Daniel Ortega para reformar el Instituto Nicaragüense de Seguridad Social
Al menos tres personas, un policía y dos jóvenes, murieron en Nicaragua este jueves en el marco de protestas a raíz de la reforma al sistema de pensiones que impulsa el gobierno.
Entre las víctimas fatales se cuenta el agente Jiltón Rafael Manzanares, que murió baleado cerca de la Universidad Politécnica Nacional, en la capital, Managua.
Allí murió también el joven Darwin Manuel Urbina, trabajador de un supermercado que pasaba por la universidad durante el enfrentamiento. La tercera víctima es Richard Edmundo Pavón, un joven que falleció en disturbios en Tipitapa, al noreste de Managua.
Las violentas manifestaciones comenzaron este miércoles a raíz del malestar social que generó el anuncio del Ejecutivo, liderado por el presidente Daniel Ortega, de aumentar la cuota de pensiones y crear una nueva cotización para los jubilados.}
Las nuevas medidas de seguridad social establecen que el pago que realizan los empleados al Instituto Nicaragüense de Seguridad Social (INSS) se incrementará de 6,25% al 7% a partir del próximo 1 de julio.
Este aumento también se aplicará a la cuota patronal, que es la que pagan los empleadores, que se modificará de forma gradual casi un 3% desde ahora y hasta 2020.
El gobierno asegura que estas medidas son necesarias para evitar la quiebra del INSS.
La vicepresidenta nicaragüense, Rosario Murillo, señaló que había fuerzas que estaban “manipulando políticamente” las protestas en contra del gobierno y defendió el accionar de la policía que ha sido criticada por el uso excesivo de la violencia.