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Ciudad Guatemala
Debido a la restricción en el servicio de la consulta externa en el Hospital Roosevelt, los pacientes deben esperar hasta febrero para ser atendidos en el consultorio médico, denunció este lunes la Procuraduría de Derechos Humanos.
Por Ana Lucía Ola
Han transcurrido diez semanas desde que los profesionales de la salud decidieron restringir el servicio en las consultas externas de los hospitales, en demanda del incremento salarial y dignificación de la profesión. Durante este tiempo, los pacientes han tenido que padecer la limitada atención y la mayoría de usuarios ha llegado a los centros únicamente para que su cita sea reagendada.
Este lunes en el Hospital Roosevelt, quienes madrugaron para ser atendidos por el médico, se toparon con que su cita fue cambiada. En el área de Ortopedia se reprogramaron más de 60 citas, mientras que en Neurocirugías de 20 pacientes solo se atendió a casos prioritarios, según Zulma Calderón, jefa de Supervisión Hospitalaria de la PDH.
A los pacientes del área de medicina interna se les anotó en su carné citas hasta para febrero o marzo del próximo año, mientras que los que llegaron a ortopedia el tiempo fue más corto, entre un mes y mes y medio, de acuerdo con un monitoreo de la PDH que durante esta semana monitoreará el servicio de consulta externa de la red hospitalaria pública.
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Las personas han dejado de acercarse a los nosocomio porque saben que el servicio es restringido, dijo Calderón. De unas 900 personas que a diario se atendían en el Hospital Roosevelt, este lunes únicamente se recibió a 360, lo que representa un descenso de pacientes del 40%.
“Esta es una situación que lamentablemente vulnera el derecho a la salud de los usuarios del servicio, tomando en cuenta que en este conflicto hay tres partes y no se ha escuchado la voz de los pacientes que en este momento son los más afectados”, refirió la representante de la PDH.
Durante los primeros días de la restricción de las consultas externas, las personas que requerían cambio de yeso o de curaciones post operatorias eran llevados en ambulancias del hospital a centros de salud cercano. Al principio eran entre 15 y 20 los trasladadas diarios, la última semana la cifra se redujo entre 7 y 10.
“El gran reto corresponde al Ministerio de Salud como a los médicos en buscar el equilibrio en el que puedan seguir avanzando en el cumplimiento de los compromisos que se han adquirido sin vulnerar el derecho a la salud de los pacientes”, agregó.
La restricción en el servicio de salud comenzó el pasado 13 de agosto, como una medida de presión por parte de los médicos y demás profesionales de la salud para exigir un incremento salarial, pues señalan que el sueldo que reciben no compensa con lo demandante de la profesión, pues tienen la “vida de las personas en sus manos”.
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