“Hoy puedo decir que los años de la injerencia extranjera abusiva, ha comenzado a terminar. La Cicig es historia y va quedando en la memoria de los guatemaltecos como otro experimento fallido de la ONU”, aseguró Álvaro Arzú durante su discurso en la sesión plenaria.
“Nunca más un experimento expuesto desde afuera a nuestra patria, nunca más cedamos nuestra soberanía a los intereses espurios de burócratas internacionales y de ONG cooptadas”, reiteró y pidió impedir la intromisión de poderes chocantes que “vienen a robarnos nuestro derecho a elegir y nuestra libertad”.
“Esa imposición externa fue introducida por agentes locales que, al final de cuentas, lo único que pretenden es una cuota de poder que han sido incapaces de lograr en elecciones libres”, afirmó.
Arzú propuso replantear los términos bajo los cuales Guatemala mantiene relación con las Naciones Unidas y sus diferentes organizaciones adscritas.
“Otros países lo están haciendo, ¿Por qué nosotros no?”, agregó.
“La democracia es más que las elecciones. Para que unas elecciones sean en verdad parte de una democracia no solo deben ser legales, sino además y fundamentalmente deben expresar la voluntad auténtica del Pueblo”, dijo.
El presidente Jimmy Morales acudió al Legislativo para presentar su tercer informe de Gobierno, ante un pleno semivacío, debido a que no se presentaron las bancadas de oposición.
Alrededor del Congreso se agruparon diversos sectores sociales que protestan en rechazo al accionar del Gobierno que puso fin al mandato de Cicig.
Durante la sesión plenaria también tomó posesión la Junta Directiva del Congreso para el período 2019-2020. La cual quedó integrada de la siguiente manera: