Parece una mezcla de rosetón gótico con cuadro impresionista, pero en realidad es la atmósfera convulsa de Júpiter.
La NASA publicó esta semana una imagen del polo norte del mayor planeta del sistema solar, donde se aprecian numerosos “ciclones de color”, es decir, retocados digitalmente.
“Las opciones de color en esta imagen revelan tanto la belleza de Júpiter como los sutiles detalles presentes en la estructura dinámica de la nube de Júpiter”, indica la agencia.
De acuerdo con el comunicado de la agencia espacial de EE.UU., la fotografía, una composición de varias imágenes captadas por la sonda Juno, muestra un ciclón “enorme y persistente” en el centro.
El gigantesco huracán está rodeado por otros “más pequeños”: sus tamaños varían entre los 4.000 y 4.600 kilómetros.
“Juntos, este patrón de tormentas cubre un área que empequeñecería a la Tierra”, indicó la agencia.
La existencia de grandes tormentas en Júpiter es conocida desde hace décadas, pero la cercanía de Juno al planeta ha permitido estudiar mejor la forma y estructura de estas tormentas.
La imagen fue compuesta por el científico Gerald Eichstädt, que utilizó datos obtenidos por las cámaras de Juno durante cuatro pases que realizó la sonda sobre el planeta, entre el 17 de febrero y el 25 de julio de 2020.
Según la NASA, el color exagerado de la imagen es parcialmente un resultado de combinar muchas imágenes individuales para crear esta vista.
“Cada nueva observación que proporciona Juno de la atmósfera de Júpiter complementa las simulaciones por computadora y ayuda a refinar aún más nuestra comprensión de cómo evolucionan las tormentas con el tiempo”, indica.
La sonda Juno forma parte del programa espacial New Frontiers de la NASA y fue lanzada el 5 de agosto de 2011 desde el Centro Espacial Kennedy, en Florida.
Ingresó a la atmósfera del planeta en 2016, luego de un recorrido de alrededor de 3.000 millones de kilómetros.
El objetivo de la misión es entender cómo se formó Júpiter, que, según los científicos, guarda secretos de cómo se originaron elementos como el agua, el helio, el metano y el hidrógeno.
La información es esencial para saber cómo se formó nuestro Sistema Solar, la Tierra y los cimientos de la vida como la conocemos.