PDH: “El gobierno de Alejandro Giammattei ha desmantelado la institucionalidad”
Estructuras del crimen organizado amenazan la democracia y la paz social, dijo Jordán Rodas, jefe de la Procuraduría de los Derechos Humanos, en su mensaje por el 25 aniversario de la firma de los Acuerdos de Paz en Guatemala.
“Los Acuerdos de Paz Firme y Duradera suscritos el 29 de diciembre de 1996 cerraron uno de los capítulos más trágicos de la historia de Guatemala”, así arranca el comunicado de la PDH en el marco del 25 aniversario de ese hecho histórico.
Sin embargo, en la publicación, el procurador indica que el país ha consumado un retroceso de 25 años durante el gobierno de Alejandro Giammattei, por el aumento de las transgresiones a la Constitución, anulación de los contrapesos de la República y violaciones a los Derechos Humanos.
“La Constitución ha sido transgredida reiteradamente, sin consecuencias para los responsables; la corrupción y la impunidad han vuelto por sus fueros; quedó desmantelada la institucionalidad de la paz y las violaciones de los derechos humanos en los últimos dos años no tienen precedentes desde la firma de los Acuerdos de Paz”, consigna el documento compartido por la PDH.
Además, señaló que ninguno de los gobiernos los asumió como compromiso de Estado, por esa razón la agenda de transformaciones no se cumplió y la inmensa mayoría de las víctimas no fueron resarcidas.
Con el actual @Guatemalagob se está consumando una grave regresión de 25 años, quedó desmantelada la institucionalidad de la paz y las violaciones de los #DDHH en los últimos 2 años no tienen precedentes desde la firma de los #AcuerdosdePaz pic.twitter.com/IEjtzzCaUf
— Jordán Rodas Andrade (@JordanRodas) December 29, 2021
Otro de los señalamientos que se destaca en el pronunciamiento del Magistrado de Conciencia es que internacionalmente el país ha dado la espalda a sus compromisos multilaterales y está quedando excluido del concierto de las naciones democráticas.
También, consigna que estructuras del crimen organizado amenazan la democracia y la paz social.
“Los discursos de odio, incitados o tolerados desde el poder, y los ataques y hostigamientos contra defensores y defensoras de derechos humanos, operadores de justicia y periodistas independientes pueden ser el pre-anuncio de la implantación de un régimen arbitrario y opresivo que enlutaría nuevamente a las familias guatemaltecas, forzando, además, nuevos desplazamientos humanos”, se lee textualmente en el documento.
Por último, el PDH enfatiza que es necesario que los diversos sectores abran espacios de diálogo y concertación.