Estudio sugiere que el calcio de huesos y dientes contiene polvo de las estrellas
Una investigación reveló que el calcio de los huesos y los dientes de las personas proviene de explosiones siderales. La Voz de América conversó con el autor principal de este estudio global
La expresión de que estamos hechos de polvo de estrellas ha sido con frecuencia usada con fines románticos o para motivar, pero un estudio reciente sugiere que es un hecho que el calcio que conforma los huesos y dientes de los seres humanos contenga polvo proveniente de la explosión de las estrellas.
Así lo confirmó Wynn Jacobson-Galán, autor del estudio que fue publicado en la revista “The Astrophysical Journal” y que por primera vez analizó con rayos X una supernova “rica en calcio” en su último mes de vida, antes de que explotara.
“Somos esencialmente material reciclado de explosiones estelares y también estrellas masivas que producen calcio, que después de millones de años se recicla, y se convierte en nuestras galaxias, planetas y material orgánico como los humanos”, dijo Jacobson-Galán a la Voz de América.
Astrónomos europeos han descubierto el que hasta la fecha es el hoyo negro más próximo a la Tierra, tan cercano que las dos estrellas vecinas a él son observables a simple vista.
El equipo de investigadores de la Universidad de Northwestern concluyó que casi el 50% del calcio en el universo se formó por las explosiones de estrellas, que liberan enormes cantidades de este mineral que se dispersa en el espacio, afirmó el astrofísico.
“Estamos muy conectados con todo. Estamos viendo cómo una cosa muy lejana produjo elementos que tanto influyen en la creación de la vida. Ya sea un arqueólogo que estudia el primer material orgánico, o si es alguien como yo, estudiando una estrella que explotó a millones de años luz de distancia, todos somos parte del mismo sistema”, reflexiona el especialista.
Según dijo Jacobson-Galán, la explosión sucedió en la galaxia llamada “Messier 100”, a unos 55 millones años luz de distancia de la Tierra y esta emitió la mayor cantidad de calcio que se haya registrado en un solo evento astrofísico.
“Podemos aprender tanta información si podemos llegar al objetivo y observar algo tan temprano y luego seguir la evolución”, contó a La Voz de América, quien explicó que más de 70 expertos en 15 países colaboraron con la investigación.
“La unión de países logró este descubrimiento, todos pusimos nuestras mentes juntas para tratar de entender qué era esta nueva explosión, porque era realmente muy joven y realmente fascinante. Fue un privilegio ser parte de este proyecto”, concluyó el astrónomo.