Desde niña soñaba con entrar en la Escuela de Iniciación Deportiva Escolar (EIDE), la cantera de futuros deportistas que han llevado a Cuba a la cima del deporte mundial.
En dos décadas de carrera ascendente, la judoca Idalys Ortiz nuevamente marca un hito al ganar la medalla de plata en la categoría de los 78 kilos en los Juegos Olímpicos de Tokio.
Ortiz acumula así cuatro medallas en cuatro Juegos Olímpicos consecutivos, igualando el récord de preseas de su compatriota, la también judoca Driulis González.
Con la conquista de la medalla de plata afirma su posición no sólo como una leyenda del deporte de América Latina sino como una de las judocas más condecoradas del mundo.
Su consagración ha llegado a costa de mucho sacrificio, pasión y dedicación, como le dijo al medio cubano Granma, antes de partir para Tokio.
“Detrás de una medalla hay mucho, por ejemplo más de la mitad de mi vida en los tatamis [las esteras en las que se practica el judo], entrenando, corriendo al sol; detrás de una medalla está que hace tres meses no veo a mi mamá o que a los 31 años no he podido tener hijos”.
Juegos Olímpicos:
Campeonatos Mundiales:
Juegos Panamericanos:
Nacida en Pinar del Río el 27 de septiembre de 1989, Ortiz incursionó en el deporte de judo a la edad de 9 años y a los 15 integró el equipo nacional de Cuba.
Después de conquistar dos títulos de judo campeonatos panamericanos en 2007 y 2008, se convirtió en la judoca más joven en lograr una medalla olímpica en la categoría pesada con un bronce en Pekín 2008.
Imbatible a nivel continental, Ortiz se alzó con el oro en los Juegos de Londres 2012, iniciando una racha de victorias al coronarse campeona del mundo en 2013 y 2014.
Después de ganar su segunda medalla de oro en los Juegos Panamericanos en Toronto 2015 (la primera fue en Guadalajara 2011), representó otra vez a su país en los Juegos Olímpicos de Río 2016, donde obtuvo plata.
Defendió su título panamericano en Lima 2019, antes de participar en su cuarta olimpíada Tokyo 2020, donde acaba de recibir la medalla de plata tras enfrentarse a la japonesa Akira Sone, en la final de la categoría de 78 kilos.
Luego llegó la hora de participar en Tokyo 2020, sus cuartos Juegos Olímpicos, un evento que tuvo que posponerse por un año por la pandemia que tuvo un impacto en su preparación física.
“Yo misma enfermé, y pasé unas cuantas jornadas con obligatorio reposo, así que estaba molida”, dijo a Granma.
Durante ese año perdió un gran número de combates importantes, elementos decisivos en la obtención de una buena forma deportiva. No obstante, encabezó con orgullo y responsabilidad el equipo femenino de Cuba a Tokio.
En su camino a la final en el icónico coliseo Nippon Budokan de Tokio, Ortiz venció a Rochele Nunes de Portugal, a Shiyan Xu de China y a Romane Dicko de Francia, a quienes dominó convincentemente.
En el combate final, hubo “mucha estrategia y mucho cuidado entre ambas”, como lo describió Granma, que “fue definido en tiempo extra por falso ataque de Idalis”.
Según el sitio oficial de los Juegos de Tolkio, Idalys Ortiz ocupó el primer puesto en el ranking mundial de Judo en 2018 y 2019. En Cuba fue nombrada Atleta del Año en 2013 y 2016 por el Instituto Nacional de Deportes y el Círculo de Periodistas Deportivos.
La plata de Ortiz, es la segunda medalla que obtiene a delegación cubana en Tokio hasta el momento, con el bronce logrado por Rafael Alba en takewondo masculino categoría de 80 kilos.