Ciudad Guatemala
Para el historiador Johann Estuardo Melchor Toledo, El Sagrario tiene un origen y que según el Diccionario de la Lengua Española es el “lugar donde se guarda y deposita el Cristo Sacramentado”, es decir, el lugar donde se coloca al Santísimo Sacramento.
En Guatemala, un Sagrario se prepara el Jueves Santo. Se coloca el Santísimo en su trono y se le hace un altar, puede ser con un rompimiento de gloria, es decir, que se pueden ver los ángeles en talla de madera que cuidan el Santísimo Sacramento o ángeles turiferarios que son aquellos que llevan un incensario.
El Sagrario tiene un origen histórico que inicia antes del Concilio de Trento, que se relaciona con el concilio ecuménico de la iglesia católica desarrollado en períodos no continuos durante 25 sesiones entre los años 1545 y 1563 y donde el Santísimo se custodiaba en una urna, después del concilio se le puso, generalmente en los retablos mayores.
Para la iglesia católica La Eucaristía, además de ser el Cuerpo de Cristo, simbolizó la unidad cristiana y la caridad. El templo era un lugar donde Cristo estaba presente, no era simplemente una reunión de fieles.
Creencias en Guatemala durante la Semana Santa
Fotografía : Nestor Galicia
Se hizo costumbre hacer un exposición del cuerpo de Cristo representado a través de una hostia el Jueves Santo y el día Corpus Christi. De hecho, el Corpus Christi fue la fiesta más importante y grande de la Iglesia Católica en Guatemala hasta los años sesenta del siglo XX.
Después la Semana Santa se volvió multitudinaria y dejó al Santísimo como una celebración moderada de cada parroquia.
Tras el paso del tiempo, el movimiento de visita al sagrario en Jueves Santo fue establecido por San Felipe Neri en Roma. A Guatemala vino la Orden del Oratorio de San Felipe Neri que trajo la devoción a los siete sagrarios.
Es una costumbre de la capital y La Antigua Guatemala, no se puede hacer en los pueblos porque solo tiene una o dos iglesias. El objetivo de la visita es prepararse espiritualmente para conmemorar la Pasión y Muerte de Jesucristo.
Fotografía : Nestor Galicia
Existen elementos dentro de la iconografía de pasión que forman parte importante de su esencia, por ejemplo la llamada Preciosísima Sangre de Cristo y el Cuerpo de Cristo que es para los católicos el símbolo y mensaje de la Salvación.
Están presentes en cada eucaristía y por supuesto en Semana Santa el Jueves Santo es muy importante, porque se cree fue en la última Cena cuando se instituyó.
Dentro del arte los sagrarios mantienen en su elaboración rasgos de la escuela altarera antigüeña y metropolitana las que estuvieron presentes en los monumentos y altares de Jueves Santo.
Los maestros altareros se esmeraban en hacerlos hermosos, para fomentar que los feligreses se conmovieran y pudieran pedir por su familia y sus problemas.
Todo era una escenografía con el fin de evangelizar. Actualmente la escuela altarera antigüeña se ha perdido y ahora hay varios artistas que se han dejado influenciar por la escuela altarera metropolitana. Estas tendencias en el arte se remontan desde la época hispánica.
Fotografía : Nestor Galicia
La diferencia entre una y otra son los elementos que se incorporan para realizar el monumento de Jueves Santo, en la antigüeña se colocan entre telones pintados a mano escenificando un pasaje de la Biblia o un escenario relacionado con la pasión, muerte de Jesús.
Los altares son acompañados de alfombras elaboradas de aserrín con frutos y flores de la época, su característica es más artesanal.
En la escuela Metropolitana ya se habla de involucrar elementos arquitectónicos por lo que se convierte en un trabajo académico.
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