Al menos ocho personas murieron y una veintena están desaparecidas por un alud de tierra registrado el lunes por la noche en la carretera que conecta Bogotá con el sureste de Colombia, a la altura del municipio de Puente Quetame, en el departamento de Cundinamarca, informaron organismos de emergencia este martes.
En una historia que no quiere terminar de sorprender: la madre de los cuatro niños que sobrevivieron en la selva durante 40 días después de que se estrellara la avioneta donde viajaban todos, estuvo viva cuatro días más después del accidente.
El caso que para muchos puede ser un milagro, para otros es un evento usual, y no por eso sencillo, de la vida en la selva.
Dos policías fueron detenidos por las autoridades colombianas por extorsionar a un comerciante, tras lo cual en un intento desesperado por ocultar la evidencia y evitar que se los confiscaran, uno de los oficiales se tragó los billetes que recibieron de la víctima.
Distintos vecinos se organizaron para fijar un colchón en la banqueta para atrapar los perros que el joven iba lanzando.
El operativo contó con tecnología de punta y saberes ancestrales. Cientos de soldados y guardias indígenas. Helicópteros, aviones. Bocinas que los llamaban con la voz de su abuela.