Son muchos los historiadores que coinciden en que Cristóbal Colón, el primer navegante europeo que llegó a América, fue un hombre sumamente astuto.
El año que se va nos deja un buen sabor en cuestiones astrofísicas.
El eclipse lunar más largo del siglo XXI tiñó de rojo el viernes a nuestro satélite, mientras que Marte, casi en su punto más cercano a la Tierra, brilló con todo su esplendor, un espectáculo que pudo verse en la mitad del mundo.
Los fenómenos astronómicos han cautivado a los seres humanos a lo largo de toda la historia.
Es uno de los espectáculos naturales más impresionantes y bellos. Pero hasta hace no tanto tiempo, era recibido con profundo temor y desataba las reacciones más inesperadas.
Un eclipse muy peculiar podrá ser visto en América la noche de este sábado 4 de julio si las condiciones del clima lo permiten.