Un grupo de manifestantes con rostros tapados destruyó lo que encontró a su paso en una iglesia de Santiago de Chile, durante las protestas que se llevan a cabo contra las autoridades.
Desde el viernes, decenas de sedes de partidos y de facciones de las Unidades de Movilización Popular fueron incendiadas, en unos incidentes que dejaron varios manifestantes muertos.
Orgullo de los chilenos y eje del transporte público, el Metro de Santiago quedó inutilizado. Más de 40 de sus estaciones fueron destruidas durante una monumental jornada de protestas que obligó al gobierno a sacar a los militares a la calle, por primera vez en democracia.
Los transportistas piden a las autoridades hacer reformas legales que les permitan modificar los camiones de carga y así poder adaptarlos a diferentes actividades económicas.
Autoridades chilenas decretaron este domingo por segundo día un toque de queda, adelantando el inicio de la medida para las 19 horas locales (22 horas GMT), en medio de la extensión del estallido social que afecta al país con manifestaciones violentas y saqueos.
El viceministro de Comunicaciones, Cristian Aguilar, informó que el Ejecutivo dará un aplazamiento de seis meses para que entre en vigencia el reglamento de velocímetros.