Este programa ha beneficiado a muchos indocumentados que llegaron a EE. UU. cuando eran niños.
Se trata del primer caso identificado de un guatemalteco que muere después de ser contagiado de coronavirus en el Centro de Detención de Stewart, Georgia, Estados Unidos.
De las 151 personas que arribaron deportadas durante la semana que finaliza -146 adultos y 5 menores- una dio positivo al coronavirus, a pesar de ello, los vuelos de deportados se reanudarán la semana entrante.
Para combatir el coronavirus rocían un desinfectante que está causando irritación de piel y ojos, sangrado de nariz, náuseas y dolores de cabeza entre los detenidos.
Los habitantes del “Triangulo Norte” son especialmente vulnerables al abuso, explotación, trafico en el proceso e migración, advierte el reporte.
Más de una treintena de niños, hijos de trabajadores "esenciales" de una comunidad maya guatemalteca asentada en Lake Worth, Florida (EE. UU.), han dado positivo al covid-19, informó a EFE la organización que les proveyó las pruebas.