Tras coronarse por undécima ocasión tanto en el Masters 1000 de Montecarlo como en el torneo de Barcelona, Nadal llega a las veinte victorias consecutivas sin perder en tierra batida.
Nadal, vigente campeón del torneo barcelonés, no dio opción a su rival, que entró en la competición tras recibir una de las cuatro invitaciones que repartió la organización.
Este título, el 76º de su carrera, le permite conservar el liderato mundial, ya que en caso de no haber revalidado su corona monegasca hubiera cedido los mandos del ránking ATP de nuevo a Roger Federer.
En la final batió a la sorprendente promesa de 19 años Stefanos Tsitsipas, que gracias a su fenomenal actuación progresó 19 posiciones y ahora ocupa el 44º puesto, la mejor clasificación ATP histórica para un griego.
Entre los sudamericanos, el argentino Juan Martín Del Potro, que decidió descansar en Montecarlo, es el mejor clasificado, manteniendo el sexto puesto.