Tras la muerte de la reina Isabel II este jueves en Balmoral, tras siete décadas de reinado, el trono pasa inmediatamente a su heredero, el ahora rey Carlos III.
Reino Unido es una monarquía parlamentaria con instituciones sólidas que no pueden realizar su trabajo la una sin la otra.
El rey es el jefe de Estado de Reino Unido. Sin embargo, los poderes del monarca son simbólicos y ceremoniales. Los reyes británicos se mantienen neutrales políticamente.
Como jefe de Estado, el rey Carlos III recibirá todos los días despachos diarios del gobierno en una caja de cuero roja, con informes previos de reuniones importantes o documentos que requieran su firma.
La primera ministra normalmente se reunirá con el rey todos los miércoles en el Palacio de Buckingham, en el centro de Londres, para mantenerlo informado sobre asuntos gubernamentales.
Estas reuniones son completamente privadas y no hay registro oficial de lo que se dice en ellas.
El rey también tiene una serie de funciones parlamentarias.
Una de las principales es designar al gobierno: tras una elección general en Reino Unido, el monarca convoca al líder del partido ganador al Palacio de Buckingham, donde lo invita formalmente a formar un gobierno.
El rey también es el encargado de disolver formalmente el gobierno antes de unas elecciones generales.
Además, el rey marca el inicio del año parlamentario con una ceremonia de apertura en el que expone los planes del gobierno con un discurso pronunciado desde el trono en la Cámara de los Lores, la Cámara Alta del Parlamento británico.
Otra función del rey es aprobar formalmente las leyes que se votan en el Parlamento para que sean válidas. La última vez que un monarca rechazó aprobar una ley fue en 1708.
El rey debe además recibir a jefes de Estado de otros países y reunirse con embajadores y altos comisionados extranjeros en Reino Unido.
Cabeza de la Commonwealth
De igual forma, suele dirigir cada noviembre el Día del Recuerdo, también conocido como Día del Armisticio o Día de los Veteranos, una jornada en la que algunos países de la Mancomunidad de Naciones (Commonwealth) recuerdan los sacrificios de los miembros de sus fuerzas armadas y civiles en tiempos de guerra.
El nuevo rey es también el nuevo jefe de la Commonwealth, una asociación de 56 países independientes y 2.400 millones de personas.
El rey Carlos III también se convertirá en el jefe de Estado de 14 países de la Commonwealth, conocidos como los reinos de la Commonwealth.
Sin embargo, desde que Barbados se convirtió en república en 2021, otros reinos de la Commonwealth en El Caribe han sugerido que podrían seguir sus pasos.
La imagen del rey Carlos III reemplazará a la de su madre en los nuevos sellos del Royal Mail, el servicio postal del país, y en los billetes del Banco de Inglaterra.
Asimismo, el texto de los nuevos pasaportes británicos se actualizará para que diga His Majesty (Su Majestad, en masculino).
Y el himno nacional se convertirá en “God Save the King”, en lugar de “God Save the Queen”.
Se espera que el rey Carlos III y la reina consorte se muden al Palacio de Buckingham, en el corazón de Londres.
Anteriormente vivían entre la residencia londinense de Clarence House, cerca del Palacio de Buckingham, y en Highgrove House, en el oeste de Inglaterra.
El príncipe William y la duquesa de Cornualles y Cambridge, Kate Middleton, se mudaron recientemente desde el Palacio de Kensington, en el oeste de Londres, hasta el Adelaide Cottage, en Windsor, en las afueras de la capital británica.
El príncipe Harry y Meghan Markle viven en California, Estados Unidos.
Según una encuesta realizada por YouGov a mediados de este año, durante las celebraciones del Jubileo de Platino de la reina, el 62% de los británicos piensa que el país debería seguir siendo una monarquía; sólo el 22% cree que el jefe de Estado debería ser elegido.
Dos encuestas de Ipsos Mori en 2021 arrojaron resultados muy similares: sólo uno de cada cinco británicos encuestados creía que la abolición de la monarquía sería buena para Reino Unido.
Sin embargo, los hallazgos de YouGov sugirieron que hubo una disminución en la aprobación de la monarquía en la última década. La tasa de aprobación pasó del 75% en 2012 al 62% en 2022.
Si bien hubo un apoyo mayoritario a la monarquía entre los grupos de mayor edad, la encuesta indicó para las personas más jóvenes podría no ser igual.
En 2011, cuando YouGov comenzó a encuestar sobre el tema por primera vez, el 59% de los jóvenes de entre 18 y 24 años pensaban que la monarquía debería continuar, en comparación con el 33% en 2022.