El mundo está en vilo en espera del resultado de las elecciones presidenciales en Estados Unidos. Panaderos de ese país dicen tener una clara noción de quién ganará entre Joe Biden y Donald Trump, gracias a sus galletas.
Elecciones políticas y competencias deportivas tienen algo en común: en ambas abundan las predicciones, así como personajes ligados a ellas. En el Mundial de fútbol de Sudáfrica 2010, por ejemplo, cobró fama el “Pulpo Paul”, al cual se le atribuían cualidades de vidente al escogar con sus tentáculos el equipo ganador de cada partido.
Este martes, el acontecimiento que tiene en vilo al mundo es la elección presidencial en Estados Unidos, en la cual hay una guerra de encuestas. Nadie parece estar dispuesto a esperar el resultado electoral para ver proclamado a uno de los candidatos.
Una panadería de Hatboro, Pennsylvania, dice tener la lave mágica para decirnos por adelantado quién ganará los comicios. Sus dueños afirman que han pronosticado con éxito los resultados electorales de 2008, 2012 y 2016 en Estados Unidos. La fórmula parece sencilla: los panaderos elaboran dos series de galletas, cada una con el color del partido político y el nombre del candidato respectivo. El número de galletas vendidas para uno y otro determina el ganador, según afirman los empresarios.
La panadería cobró celebridad luego de que Eric Trump, hijo del candidato republicano, se enterara del pronóstico y visitara personalmente el establecimiento.
En cuanto a las elecciones de este día en Estados Unidos, el protocolo de la “galleta electoral” aún no se ha cumplido, por lo que no es posible aún dar el resultado oficial. Este será publicado justo antes de que se publiquen los primeros sondeos acerca de la elección real.
No obstante, y por lo menos en la carrera electoral marcada por las galletas de Pennsylvania, ya hay una tendencia muy clara. Hasta el momento, el candidato demócrata, Joe Biden, acumula más de 5.100 galletas vendidas, mientras que su oponente, Donald Trump, amasa casi 28.000.
Si este resultado coincide con la voluntad de los electores estadounidenses, es cosa que está por verse. Lo que sí podemos prever es que, para las elecciones de 2024, los habilidosos empresarios de Hatboro volverán a aparecer con sus galletas bipartidistas, presumiendo de sus cualidades políticas. Y si eso ayuda a las ventas, ni quien se acuerde ya del sabor.