La historia de las cartas de amor que “El Chapo” Guzmán le enviaba a Rafael Caro Quintero mientras estaba preso
Joaquín “El Chapo” Guzmán habría logrado mantener comunicación con Rafael Caro Quintero al hacerse pasar por sus admiradoras para enviarle cartas mientras el fundador del Cártel de Guadalajara estaba preso.
Joaquín “El Chapo” Guzmán y Rafael Caro Quintero son dos de los narcotraficantes más poderosos y temidos en la historia de México debido a su gran influencia en el tráfico de droga hacia EE.UU.
La historia entre ambos capos del narcotráfico, quienes coincidieron dentro del Cártel de Guadalajara en su momento de mayor éxito, no acabó con la detención de Caro Quintero en 1985, ya que “El Chapo” y “El Narco de Narcos” continuaron en contacto mientras estaba en prisión.
Durante su tiempo recluido en el penal de alta seguridad de Puente Grande, Jalisco, Rafael Caro Quintero habría recibido cartas románticas por parte de dos mujeres llamadas Soledad y Eréndira, con quienes se presuntamente tenía un vínculo amoroso previo a su detención.
Sin embargo, detrás de estos mensajes de amor realmente se encontraba Joaquín “El Chapo” Guzmán, quien le enviaba estas cartas al fundador del extinto Cártel de Guadalajara para mantener contacto con él e informarle sobre la actualidad del mundo del narcotráfico.
De acuerdo al escritor Jesús Lemus, autor del libro Los Malditos 2. El último infierno, “El Chapo” le enviaba cartas a Caro Quintero bajo los nombres de Soledad o Eréndira con el fin de no ser descubierto y tener comunicación constante.
“En ellas le contaba de manera muy escueta las últimas novedades en la calle. Noticias ‘que salían en la tele sobre la guerra contra el narco’. Le decían ‘cómo estaba la familia’ en el último párrafo no dejaban de refrendar ‘su apoyo y solidaridad para hacer lo que fuera’ para que él estuviera bien”, reveló Lemus en este libro.
La correspondencia “amorosa” entre Joaquín “El Chapo” Guzmán y Rafael Caro Quintero duró solamente tres años, de 2007 a 2010 mientras “El Narco de Narcos” estuvo preso en el penal Puente Grande.
Al momento de su último traslado previo a su liberación, cuando pasó al Reclusorio Preventivo de Guadalajara, la comunicación entre ambos narcotraficantes se perdió y las cartas de amor dejaron de llegar.
Rafael Caro Quintero salió de prisión en 2013 después de estar tras las rejas por 28 años debido al secuestro, tortura y asesinato Enrique “Kiki” Camarena, agente especial de la DEA.
No obstante, meses después de su liberación, las autoridades revocaron esta decisión con lo que el capo del narcotráfico se convirtió en una de las personas más buscadas por la DEA y se ofreció una recompensa de US$20 millones por información sobre su paradero.
Tras casi nueve años prófugo de la justicia, este viernes 15 de julio las autoridades mexicanas informaron sobre la recaptura de Rafael Caro Quintero durante un operativo realizado en Sinaloa y actualmente el narcotraficante se encuentra a la espera de su posible extradición a EE.UU.