Conferencia Episcopal de Guatemala se solidariza con la Iglesia Católica de Nicaragua tras hostigamiento de Ortega
La Conferencia Episcopal de Guatemala expresó su solidaridad con la Iglesia Católica nicaragüense, que vive un asedio y persecución por parte del gobierno orteguista.
La Conferencia Episcopal de Guatemala (CEG) se solidarizó y expresó su cercanía con la Iglesia Católica de Nicaragua, en momentos de persecución y hostigamiento por parte del gobierno de Daniel Ortega.
La Iglesia se solidarizó especialmente con los sacerdotes que se encuentran privados de libertad en ese país, así como con monseñor Rolando Álvarez, obispo de Matagalpa, ante el asedio que sufre por parte de la Policía de ese país.
“La libertad de expresión es propia de los derechos del hombre. Nuestro cariño y apoyo se extiende a todos los católicos nicaragüenses a quienes les recordamos la promesa hecha por nuestro Salvador: ‘Yo estaré con ustedes todos los días hasta el fin del mundo'”, dice el comunicado.
Álvarez fue acusado el viernes último por la Policía Nacional de intentar “organizar grupos violentos”, supuestamente “con el propósito de desestabilizar al Estado de Nicaragua y atacar a las autoridades constitucionales”, y desde el jueves se encuentra retenido junto a cinco sacerdotes y seis laicos en el Palacio Episcopal, que está sitiado por fuerzas especiales policiales.
Las relaciones entre los sandinistas y la Iglesia católica de Nicaragua han estado marcadas por roces y desconfianzas en los últimos 43 años.
Ortega ha tildado de “terroristas” a los obispos nicaragüenses que actuaron como mediadores de un diálogo nacional con el que se buscaba una salida pacífica a la crisis que vive el país desde abril de 2018.
En ese contexto, varias radioemisoras católicas también han sido cerradas.
Después de más de 30 años de servir en Nicaragua, un grupo de religiosas de la Asociación Misioneras de la Caridad, fundada por la madre Teresa de Calcuta, salieron del país el 6 de julio último, custodiadas por agentes del Ministerio de Migración y Extranjería, luego de ser expulsadas tras ilegalizarse la organización con la cual se encontraban operando.
Nicaragua está sumida en una crisis que, según la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) dejó al menos 355 muertos en 2018, de los cuales Ortega admitió 200 y alegó que se defendía de un supuesto golpe de Estado.
La crisis empeoró con las elecciones de noviembre pasado, cuando Ortega y su esposa, la vicepresidenta Rosario Murillo, fueron reelegidos en sus cargos, en un proceso criticado porque siete de sus potenciales rivales fueron arrestados y dos huyeron al exilio.
Con un 58.5% de creyentes, la Iglesia Católica es la religión con más fieles en Nicaragua, según el último censo nacional.
La Conferencia Episcopal pide en el texto a “los hermanos centroamericanos, especialmente a los guatemaltecos” que oren por el país vecino.
*Con información de EFE
(Foto principal: Monseñor Rolando Álvarez camina con el Santísimo por las calles mientras patrullas y policías lo vigilan: @ulisesmendieta_/Twitter)