El volcán Pacaya continúa en erupción y suma 60 días en actividad
La erupción que mantiene el Pacaya causa movimientos sísmicos y lanza ceniza que puede afectar a varias comunidades cercanas a San Vicente Pacaya, Escuintla.
El volcán Pacaya cumple, este 5 de abril de 2021, 60 días de estar en erupción y según el reporte del Instituto Nacional de Sismología, Vulcanología, Meteorología e Hidrología (Insivumeh), la actividad del coloso continúa en fase alta.
El Insivumeh detalló en su boletín que la erupción es de tipo estromboliana y que el Observatorio del Volcán de Pacaya reporta que debido a las condiciones del tiempo que imperan en la zona desde anoche, no ha sido posible observar la actividad en el cráter Mackenney ni percibir ningún sonido asociado con ésta.
Explica que no se descarta la probabilidad de que se den nuevas emisiones de ceniza y gases magmáticos desde el cráter o las fisuras en el flanco sur, y por consiguiente, que se produzca caída de ceniza de forma débil sobre comunidades de los flancos oeste y sur, como El Patrocinio, San José El Rodeo, Los Ríos, Finca El Chupadero y Los Pocitos.
La actividad efusiva del Pacaya sigue alimentando el flujo de lava en el flanco oeste, el cual alcanza una longitud de 2 mil 800 metros, los que causan incendios en la vegetación y desprendimiento de bloques incandescentes en su frente y flancos, los cuales pueden causar lesiones graves.
El movimiento del magma al interior del edificio volcánico y la expulsión de lava hacia la superficie provoca tremor sísmico, el cual es registrado por las estaciones sísmicas alrededor del volcán.
Según el Insivumeh, no se descarta que surjan nuevos flujos de lava o que se produzcan columnas eruptivas mayores en las próximas horas o días, ya que el nivel de actividad volcánica permanece alto.
El volcán Pacaya comenzó su actividad eruptiva el 4 de febrero pasado y durante 60 días ha tenido episodios fuertes de erupciones que incluso obligaron al cierre del Aeropuerto Internacional La Aurora el 25 de marzo último, durante 24 horas, debido a la gran cantidad de ceniza que cayó ese día.
El Volcán de Fuego
El Observatorio del Volcán de Fuego reporta de 8 a 12 explosiones débiles y moderadas por hora, que generan columnas de ceniza gris a alturas de 4 mil 300 a 4 mil 700 metros sobre el nivel del mar que dispersan al oeste y suroeste, entre 8 y 15 km de distancia, produciendo caída de partículas finas de ceniza en el área de Panimaché I, Panimaché II, Morelia, Santa Sofia y otras comunidades en esa dirección.
Estas explosiones elevaron material incandescente a 300 metros sobre el cráter y generaron avalanchas débiles que descendieron por las barrancas Santa Teresa, Ceniza, Taniluyá, Trinidad, Las Lajas y Honda, algunas alcanzando la orilla de la vegetación.
Esta actividad se acompaña de sonidos débiles de locomotora de tren en lapsos de 2 a 3 minutos, así como de retumbos débiles y moderados, que generan ondas de choque perceptibles en las comunidades cercanas al volcán.
Volcán Santiaguito
El Observatorio del Complejo Volcánico Santa Maria-Santiaguito reporta actividad de explosiones y avalanchas de bloques débiles a moderadas, las cuales descienden por los flancos oeste, sur y este del Domo Caliente, algunas hasta alcanzar su base, levantando nubes de ceniza a su paso.
Las explosiones generan columnas de ceniza que se elevan hasta 3 mil 500 metros sobre el nivel de mar que se dispersan hacia el sur y suroeste.
La desgasificación genera sonidos similares a turbina de avión. Debido a la permanente extrusión de lava en bloques desde la cúpula del Domo Caliente hacia el oeste-suroeste, se mantiene la posibilidad de que se generen tanto avalanchas de bloques y ceniza, como flujos piroclásticos de largo alcance en esa dirección.