Escuintla pierde sus bosques ante el incremento de talas ilegales
Sectores que se vinculan con la venta de madera en la costa sur exigen a las autoridades que implementen acciones “contundentes” contras las talas ilegales, ya que ponen en peligro los bosques.
Se dice que más del 50 por ciento de la madera que se comercializa proviene de talas ilegales, con lo que se condena a los bosques donde no se implementan proyectos de reforestación.
Melvin Navarro, regente forestal, consultor ambiental y gerente del aserradero El Tejar, de Masagua, dijo que procesan más de 500 tonelada de madera al año, pero lo hacen de forma responsable, con el objetivo de mantener equilibrio en los recursos naturales.
“Nosotros estamos en ley y como parte de la responsabilidad en la comercialización de la madera reforestamos, pues estamos conscientes de que quienes lo hacen de forma ilegal depredan gran cantidad de árboles que nunca se recuperan”, dijo Navarro.
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Añadió que faltan acciones para conservar los bosques. “Esto es un compromiso de todos, desde los comunitarios al observar que están talando los bosques, hasta los agentes de la Policía Nacional Civil que patrullan las carreteras, pues es por ese medio que la madera llega hasta los negocios clandestinos”, resaltó Navarro.
Fermín Camposeco, técnico del Instituto Nacional de Bosques (Inab) en Escuintla, dijo que debido a las acciones que han emprendido por medio de los incentivos forestales, han logrado la recuperación de 16 mil hectáreas de bosque en el departamento.
“Calculamos que se restablecieron más de 18 millones de árboles con estas acciones y se emprenden otras para sancionar a quienes no cumplen con las normas y que no quieren regularizarse, pues al final no solo es la tala ilegal, sino que también el que no pagan impuestos”, señaló Camposeco.
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Con la pérdida de bosques en Escuintla, también se pone en riego las fuentes de recarga hídrica, lo que impacta, principalmente en la temporada seca, en la producción de alimentos, pues se carece de agua para sistemas de riego.