Duermen en el suelo y permanecen entre basura: Pacientes denuncian mala atención en hospital del IGSS
Resultados de los test tardan hasta tres días. IGSS asegura que gestiona hoteles para pacientes con covid-19.
Pacientes denunciaron tratos inhumanos e instalaciones inadecuadas del Instituto Guatemalteco de Seguridad Social (IGSS) para la atención del coronavirus en el hospital de enfermedades de la zona 9 capitalina.
La Procuraduría de los Derechos Humanos (PDH) informó este 22 de mayo que, en una visita, la Defensoría de la Salud se entrevistó con los pacientes y tomó nota de las condiciones en las que se aborda el covid-19 en aquel hospital.
En un comunicado, el IGSS dijo que hay un repunte crítico de la enfermedad, por lo que gestiona hoteles para los casos asintomáticos o leves y añadió que la PDH quedó “satisfecha” al observar la atención en áreas de aislamiento y hoteles.
Además, expuso: “Debido a que Guatemala se encuentra en la etapa crítica del covid-19, nuestros hospitales han recibido una mayor carga de personas durante esta semana, por lo que se está trabajando en realizar traslados de casos asintomáticos a las áreas de aislamiento”, además han solicitado a la población “no salir si no es necesario, porque durante estas semanas el riesgo de contagio es alto”.
Hallazgos
En el hospital de enfermedades hay 123 pacientes, pero 52 de ellos están en pasillos y 34 en una carpa cerca de la calle.
La inspección documentó que entre pacientes no hay distanciamiento de 1.6 metros, en la carpa no hay sillas y las personas cenaban en el piso.
Solo 25 pacientes tenían cama o camilla y, de acuerdo con la PDH, se encontraron dos pacientes por cama. El 21 de mayo se trasladaron a 45 pacientes a los diferentes servicios habilitados para seguimiento y cuarentena.
La mayoría de los pacientes están en el suelo, algunos durmiendo en colchonetas, otros en esponjas o cartones.
Personas mayores fueron encontradas en sillas de ruedas, en las cuales han dormido por más de tres días.
Los pocos pacientes que tenían sábanas indicaron que no se les ha cambiado desde que se las entregaron, de entre tres a seis días.
Solo tienen una mudada de ropa hospitalaria desde que llegaron.
No hay suficiente agua embotellada y la PDH observó solo dos garrafones de agua para los 123 pacientes.
Personal de la PDH vio nueve bolsas rojas, presumiblemente de desechos bioinfecciosos, que fueron retiradas al momento de la visita, y colocadas en las afueras del área de aislamiento.
Hay basura en los lugares donde están los pacientes.
La espera de los resultados de test lleva de seis horas a tres días.
El personal médico solo hace reporte verbal del examen, sin nada por escrito.
Había pacientes positivos junto con quienes esperaban resultado, colocándolos en riesgo de contagio.
Los pacientes con enfermedades crónicas no están recibiendo medicina, sino que ellos mismos deben llevarlos, corriendo el riesgo de comprometer su estado de salud si no los tienen a su alcance.
Todos los pacientes entrevistados indicaron que desde su ingreso no han sido revisados por ningún médico, incluso que no se les toma la temperatura.
Por lo menos 8 pacientes estaban solicitando egreso contraindicado, manifestando que actúan de esta manera debido a la incomodidad del lugar en donde son atendidos. Al consultar al personal médico respecto de esta situación, indicaron que de acuerdo al protocolo, se le da el egreso contraindicado y se notifica para el seguimiento en casa, de ser positiva la prueba; sin embargo, no se tiene la certeza de que efectivamente estos casos sean seguidos por el área de epidemiología como corresponde.
La PDH menciona el caso de una mujer de 77 años que ingresó desde el lunes 18 de mayo y aún no cuenta con cama, camilla o traslado, duerme encima de cartones en el suelo y se le proporcionó una silla de ruedas la misma noche de la verificación.
A los pacientes únicamente se les proporcionó una mascarilla quirúrgica al momento del ingreso, la que no ha sido cambiada. Algunos tienen 6 días con la misma mascarilla.
Solamente se cuenta con un sanitario en el área de pasillo para los pacientes, es de difícil acceso y utilizado por hombres y mujeres. Además, tienen a su servicio una ducha para todos. En el baño no se encontró papel ni jabón para lavarse las manos.