Gustavo Alejos dice que “no es pecado” tener carne y cervezas en hospital
Gustavo Alejos queda ligado en un caso más, ahora por evasión.
Gustavo Alejos, señalado de influenciar en la elección de cortes judiciales, reprochó este 20 de febrero que tener carnes, cervezas y licores en el anexo del sanatorio privado Ciudad Nueva, zona 2, donde estaba internado por supuesta enfermedad, “no es pecado”, pero su argumento no sirvió y fue ligado a un proceso más.
Erika Aifán, jueza de Mayor Riesgo D, lo ligó por el delito de evasión y lo dejó en prisión preventiva.
La juzgadora aclaró que el permiso de prisión preventiva en el hospital es para la sede central y no para el anexo, que está enfrente.
Aifán recordó que hay contradicciones en las evaluaciones médicas que el Instituto Nacional de Ciencias Forenses (Inacif) intentó hacer a Alejos porque cada vez que los médicos de esa institución se presentaron a evaluarlo no asistió.
La jueza recibió los informes médicos del Inacif y leyó la conclusión: “su condición clínica estable y no presenta signos clínicos que sugieran que está peligro su vida”.
Además, Aifán expuso que los análisis médicos del Inacif concluyeron que puede “recibir su tratamiento en un ambiente no hospitalario”.
Alega que no escapó
El exsecretario privado del expresidente Álvaro Colom rechazó en la audiencia que el Ministerio Público (MP) utilizó fotos de aquellos productos durante la audiencia para señalarlo cuando el caso debe obedecer únicamente a la supuesta evasión del centro hospitalario.
Más adelante en la indagatoria, Alejos se refirió a las cervezas que fueron encontradas porque fueron un regalo del día del cariño.
Esa refrigeradora con bebidas gaseosas, carnes, embutidos y cervezas fue documentada por el MP cuando detuvo a Alejos el 18 de febrero en el anexo del sanatorio privado Ciudad Nueva, por supuesta evasión. Y fue precisamente allí que jueces, comisionados de postulación de cortes y aspirantes a magistrados lo visitaron entre el 12 y 16 de febrero.
Alejos dijo que en ningún momento tomó un vehículo para huir del hospital y que el Ministerio Público (MP) y la Policía Nacional Civil (PNC) lo detuvieron en ese mismo lugar, con lo cual, según él, no cuadra el delito.
Sobre las fotos en las que se le ve cruzando la calle entre el hospital y el anexo sin custodia del Sistema Penitenciario, Alejos dijo que eso obedeció a que iba a una clínica de control de peso, porque necesita bajar 20 libras, y que si fue fotografiado afuera de ese centro fue porque salió a despedirse de sus visitas.
Asimismo se quejó de la cárcel de Matamoros, donde guardaba prisión provisional y que calificó de inhumana, porque está junto a personas que han cometido “delitos muy graves” y mencionó a Eduardo Guayo Cano, condenado a 372 años por la muerte de policías en Salcajá en 2013, y personas sindicadas por la muerte del Marino. Dijo que pasa 24 horas encerrado, sin luz ni baño y hoy tuvo que bañarse con un garrafón de agua pura.
¿Y las visitas?
En rueda de prensa, Alejos dijo que no se referirá sobre las reuniones que tuvo entre el 12 y 16 de febrero en el anexo de Ciudad Nueva, donde supuestamente hubo manipuleo para definir listas de magistrados judiciales, porque la indagatoria de hoy no se refiere a esos hechos que le señalan.