Vendedores informales utilizan las banderas blancas para que la ayuda llegue
Quienes no cuentan con un trabajo estable ni un sueldo fijo, y dependen de sus ventas diarias para poder comer, son fuertemente golpeados por la crisis del coronavirus. Muchos han salido a las calles con su bandera blanca esperando que la ayuda llegue.
Las banderas blancas se han convertido en la señal para que los guatemaltecos indiquen que no tienen alimento.
En las últimas semanas cientos de personas han colocado banderas afuera de sus hogares esperando que la ayuda que tanto necesitan llegue.
Sin embargo, ahora, incluso los vendedores informales han decidido usarlas para colocarlas en las carretas donde transportan los productos que venden.
En un recorrido en la Plaza de la Constitución, la mayoría de ventas informales tienen una bandera, un plástico o una playera blanca.
Ese es el caso de Manuel Ochoa que se dedica, desde hace más de 30 años, a vender helados alrededor de la Plaza de la Constitución. Tiene 6 hijos y comenta que, desde que inició la emergencia, las ventas están muy bajas y no le alcanza para la comida de su familia. Asegura que no ha recibido aún la ayuda del gobierno y por eso tiene que salir a la calle a vender.
“Se han acercado gente de buen corazón a regalarnos una bolsa con un pan con frijoles y un juguito para que podamos engañar a la tripa porque no tenemos para comer ni un tiempo de comida. No tenemos dinero, la gente acá no tienen dinero y cómo van a trabajar si todo está suspendido” dijo Ochoa.
Otra de las trabajadoras informales que colocó una bandera blanca en su carreta es Alicia Ruano. Ella vende desde hace más de 20 años producto de la temporada.
Ruano tuvo que cambiar las túnicas de cucuruchos por las mascarillas, que ella misma fabrica, también gel antibacterial, lentes y juegos de mesa. Personas se han acercado a ella para darle algunos víveres, pero la ayuda del gobierno aún no llega a su casa.
“Ha llegado a asentamientos que hay cerca de mi casa, pero a la colonia no llegó. Yo le hago un llamado al señor presidente porque no solo en los asentamientos necesitan, hay colonias en donde realmente habemos personas muy necesitadas que alquilamos y que tenemos que mantener a nuestras familias, algo para subsistir” agregó Ruano.
Ella tenía hipotecada su casa y con esta emergencia ya no pudo pagarla, le han indicado que cuando la crisis termine debe entregar su vivienda.
Como ellos dos, hay decenas de personas que han decidido esperar sentados en la plaza de la constitución a que alguien se acerque a ayudarlos.
Cuando un automóvil brinda ayuda rápidamente se corre la voz y todos se apresuran para poder recibir algo de comer o una ayuda económica, dejando a un lado el distanciamiento social que es indispensable para no ser contagiados.
Banderas blancas en El Naranjo
En el fondo del puente El Naranjo viven más de 60 familias, en el asentamiento Shell. Este sábado, un grupo de vecinos se armó de valor y con una bandera blanca en las manos ascendieron a la carretera, movidos por el hambre y con la esperanza de conseguir alimento.
“La mayoría de las personas que habitamos acá vivimos de un negocio y no hemos podido salir a trabajar”, se lamenta Patricia Flores, una de las mujeres del asentamiento que salió al puente para hondear una bandera blanca y pedir ayuda a los conductores que transitan por el lugar.
Las personas que se conducían en sus vehículos decidieron parar y compartir víveres, en otros casos hubo personas que les brindaron ayuda económica.