Después de probar este picante en un concurso, el hombre comenzó a jadear, sentir dolores en el cuello y fuertes dolores de cabeza.
Cuando uno se dispone a comer picante, es posible dar por hecho que sentirá algo diferente, que a veces puede ser extremo.
Quizás por eso muchos de los chiles o ajíes tienen un nombre que ya te ponen sobre aviso, por ejemplo: aliento de dragón.
Pero ¿qué esperarías de un pimiento llamado Carolina Reaper?
En Estados Unidos a un hombre de 34 años le hizo ir al hospital, según publica el BMJ Case Reports, una revista que da a conocer casos clínicos.
Después de probar este picante en un concurso, el hombre comenzó a jadear, sentir dolores en el cuello y fuertes dolores de cabeza que parecían truenos, describe la publicación.
El dolor acabó por desaparecer, pero al cabo de unos días volvieron esos terribles dolores de cabeza y decidió ir al hospital.
Los escáneres craneales que le hicieron revelaron que tenía constricción en algunas arterias, lo que puede provocar fuertes dolores de cabeza, informó el equipo médico al BMJ.
El término científico para este estrechamiento temporal de las arterias es el síndrome de vasoconstricción cerebral reversible (SVCR). Cinco semanas después el dolor había desaparecido y los escáneres mostraron que las arterias habían vuelto a su estado normal.
Carolina Reaper era en el momento de este incidente, 2016, el chile más picante del mundo según la escala de Scoville, una especie de barómetro para medir el picor de una guindilla o cualquier otra comida derivada de los chiles.
La escala es en realidad una medida de la concentración del compuesto químico capsaicina, que es el componente activo que produce la sensación de calor en los seres humanos y se mide en unidades de calor de Scoville (SHU, por su sigla en inglés).
Carolina Reaper alcanza los más de dos millones de unidades en la escala Scoville. Un pimiento habanero alcanza las 350.000 unidades y está en el puesto número 9 de este barómetro.
El doctor Kulothungan Gunasekaran, uno de los autores del informe publicado en el BMJ, asegura que el Carolina Reaper es un ají común.
Mucha gente lo consume sin sufrir ningún tipo de efecto secundario más del ardor en la lengua.
Ahora, este caso abre la posibilidad de que el compuesto capsaicina, importante por su papel a la hora de aliviar el dolor y la disminución de la presión arterial, puede tener efectos inesperados en algunas personas.
El caso de este paciente es raro y los doctores del estudio no culpan al chile ni prohíben consumir este tipo de picantes, pero sí hacerlo con precaución.
Si quieres experimentar algunos de los chiles más picantes estos son los cinco primeros que aparecen actualmente en la tabla de Scoville.
Los pimientos provienen originariamente del continente americano, pero se cultivan en todo el mundo.
Muchas empresas y agricultores se dedican ahora a crear chiles picantes mezclando semillas que den lugar a una nueva denominación, de acuerdo con el Chili Pepper Institute de Nuevo México, en Estados Unidos.