Su exclusión de la feria de tecnología más grande de Estados Unidos y una de las más grandes del mundo ha causado polémica entre cientos de usuarios de redes sociales.
Un juguete sexual diseñado para mujeres quedó fuera de la edición de 2019 de CES.
Se trata del robot vibrador Osé, que según sus fabricantes, es el primero que funciona sin necesidad de usar las manos.
La empresa creadora, Lora DiCarlo, contó este martes en su página web que en octubre ganó un premio a la innovación por el producto que entonces participó con el nombre de Vela.
El premio fue entregado por la Asociación de Tecnología del Consumidor (CTA, por sus siglas en inglés), organizadora del propio CES.
Más tarde, fue invitada a exhibir el dispositivo en CES, que se celebra del 8 al 11 de enero en Las Vegas.
“Pero luego nos informaron inesperadamente que los administradores de CES y de la CTA habían anulado nuestro premio y que no podríamos exhibir a Osé en CES 2019”, detalla la compañía.
Una usuaria de Twitter identificada como Katy Rose escribió: “¿Por qué CES se siente amenazada por mujeres empoderadas y por los productos que las empoderan?”.
Lora DiCarlo asegura que la CTA explicó que había incluido por error al dispositivo en la feria y que podía retirar cualquier producto inmoral u obsceno en cualquier momento.
Este martes, días después de aquella primera explicación, la CTA dijo al portal The Next Web que el producto no encaja en ninguna de sus categorías y que nunca debió ser aceptado.
“Nos hemos disculpado con la compañía por nuestro error”, añadió.
Pero la directora ejecutiva de Lora DiCarlo, Lora Haddock, dijo que CES y la CTA tenían una historia de prejuicios de género.
En el sitio web de la compañía, Haddock cita varios ejemplos de otros productos orientados a las mujeres incluidos en la categoría de premios en que se encontraba el vibrador.
“(Lo descalificaron) porque es un juguete sexual PARA MUJERES. CES es, literalmente, un gran juguete sexual para los hombres y eso siempre ha estado bien”, dijo Sara Mauskopf.
“Dos aspiradoras robóticas, un monopatín robótico, cuatro juguetes para niños, un robot acompañante de compras… Parece que todos los intereses de las mujeres están cubiertos, ¿no?”, dijo.
“Osé se ajusta claramente a la categoría de robótica y drones, y los jueces expertos de CTA están de acuerdo”, añadió.
El producto fue diseñado en colaboración con un laboratorio de robótica en la Universidad Estatal de Oregón (EE.UU.) y tiene ocho patentes pendientes de aprobación, según Haddock.
“Creemos firmemente que las mujeres, personas no binarias, no conformes con el género y las personas LGTBQI debemos reclamar nuestro espacio en el placer y la tecnología”, afirmó.
Haddock también dijo que había un doble estándar en CES cuando se trataba de productos de salud sexual dirigidos a hombres y mujeres.
“Se permite que la sexualidad de los hombres sea explícita, al exponer un robot sexual en forma de una mujer de proporciones irreales y porno en realidad virtual”, escribió.
Los productos a los que se refirió son el robot sexual RealDoll Harmony, que debutó en el evento de 2018, y a una sala que mostraba pornografía en realidad virtual, en 2017, y que recibió más de 1.000 visitas en su día de apertura.
Cientos de usuarios de Twitter reaccionaron a la decisión de CES con el hashtag #CESGenderBias (Prejuicios de género en CES).