La tubería del área de lavandería del Hospital Regional de Quiché colapsó e inundó el sector de las secadoras, por lo que trabajadores temen un corto circuito que pudiera provocar una tragedia.
Las tuberías de las secadoras se dañaron, el agua es expulsada en unas partes a alta presión y en otras gotea, provocando que se estanque en la parte de atrás de las máquinas.
El director del hospital, Salomón Delgado dijo que buscan solucionar el problema, aunque agregó que las lavadoras y secadoras tienen más de 25 años de uso, lo que hace que su mantenimiento sea complicado.
Tres semanas atrás, Jordán Rodas, procurador de los Derechos Humanos, visitó el Hospital Regional de Quiché, donde le informaron que todo estaba bién, sin mencionar el estado de las lavadoras y secadoras.
Marleny Quevedo, auxiliar interina de la Procuraduría de los Derechos Humanos de Quiché dijo que abrirán un expediente para verificar la situación en ese centro asistencial.