Cada vez más canguros y otros animales nativos se acercan a las ciudades y carreteras de Australia para intentar sobrevivir a una sequía agobiante. Esto ha traído aparejado un aumento de la cantidad de animales que mueren atropellados en las carreteras.
Un riesgo mortal asola las rutas australianas… y está empeorando.
A medida que más canguros y otros animales nativos se acercan a las ciudades y carreteras, aumenta la cantidad de animales que mueren atropellados.
Las empresas de seguros sostienen que los accidentes con animales han aumentado 20% en tres años.
Pero también tiene que ver con el aumento de la población de canguros, que se duplicó a 46 millones en una década, un problema para granjeros como Matt.Esta escena se ha convertido en algo común.
Su gran tamaño y peso significa que atropellarlos puede ser también mortal para los conductores.
Este hombre chocó con dos marsupiales.
Para evitar accidentes mortales, la esposa de Matt, Sandra, está enseñando a los agricultores jóvenes técnicas de ‘conducción en la sequía’.
Sin señales de que la sequía mejore, es probable que siga habiendo este tipo de encuentros, mientras los desesperados animales viajan para mantenerse vivos.
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