El presidente Jimmy Morales llegó a San Andrés Sajcabajá, Quiché para inaugurar una carretera con longitud de 12 kilómetros, donde fue recibido en medio de gritos y abucheos por parte de los pobladores.
Jimmy Morales junto al ministro de Comunicaciones José Luis Benito y el diputado Estuardo Galdámez llegaron hasta el municipio de San Andrés Sajcabajá, donde fueron recibidos con carteles exigiendo su salida y con gritos donde mostraban su malestar con el mandatario.
Durante la inauguración del tramo carretero, los pobladores abucheaban a Morales a tal punto que no lo dejaban hablar, por ello el mandatario pidió a una mujer que estaba en el escenario que dirigiera unas palabras diciendo “y esta voz que va ha hablar ahorita es de las que yo sí quiero escuchar”.
Transportistas no le permiten hablar al presidente pic.twitter.com/4UfLOcxKzN
— Héctor Cordero (@corderoquiche) December 22, 2018
Los vecinos arrojaban agua a donde se encontraba Morales, mientras el escenario fue rodeado por elementos de la SAAS y del Ejército.
Transportista exigen que diputado Estuardo Galdámez baje de la tarima a la llegada del presidente a inauguración en San Andres Sajcabajá, Quiché. pic.twitter.com/q1TYBbN1rw
— Héctor Cordero (@corderoquiche) December 22, 2018
La protesta comenzó por la inconformidad de transportistas debido a que la construcción de otras dos carreteras quedará paralizada, mientras que el mandatario efectuó la actividad para entregar un tramo que conecta la aldea Santa Rosa Chujuyub con la cabecera municipal.
Tensión en San Andres Sajcabajá, Quiché. pic.twitter.com/rVbs8t5oBs
— Héctor Cordero (@corderoquiche) December 22, 2018
El discurso de Morales se interrumpió en varias ocasiones porque los pobladores pedían que se retirara de la tarima.
EN DIRECTO en #Periscope: Inauguración del mejoramiento carretera RD-Qui-5 Tramo: Aldea Santa Rosa Chujuyub-San And… https://t.co/r12qic0y7v
— Ministerio de Comunicaciones (@CIV_Guatemala) December 22, 2018
Según el Ministerio de Comunicaciones, Infraestructura y Vivienda (CIV), el proyecto, que se inició en agosto de 2017, tuvo un costo de 67,65 millones de quetzales y se ejecutó en 16 meses.
Con información de: Hector Cordero.