La PPA es una enfermedad hemorrágica altamente infecciosa que afecta tanto a cerdos domésticos, como silvestres, y es inofensiva para las personas. Durante décadas, no se había registrado ningún caso en el hemisferio occidental y no existe vacuna para combatirla.
La tasa de mortalidad y los signos clínicos pueden variar en función de la virulencia del virus y del tipo/especie de porcino. La forma aguda de la enfermedad se caracteriza por fiebre elevada, depresión, anorexia y pérdida de apetito, hemorragias (enrojecimiento de la piel de las orejas, abdomen y patas), abortos en las cerdas preñadas, cianosis, vómitos, diarrea y muerte al cabo de 6-20 días. La tasa de mortalidad puede llegar al 100%.
Se conocía de la presencia de la enfermedad en República Dominicana y en septiembre se confirmó en Haití, ante lo que Efraín Medina Guerra, director ejecutivo de Oirsa, con sede en El Salvador, informó que han estado trabajando en el control animal y desinfección de las áreas en ambos países, pero especialmente en República Dominicana.
La entidad regional envió al director regional de Salud Animal y a dos técnicos, quienes están trabajando con instituciones sanitarias del país caribeño y Medina afirmó que esta semana se reunirán con funcionarios de la secretaría de Agricultura de Estados Unidos para coordinar algunas acciones y lograr la erradicación de la enfermedad en esos países, para lo que pedirán apoyo técnico y económico.
Además, esperan elaborar en conjunto un plan de mediano plazo erradicar la enfermedad y gestionar apoyo de cooperación internacional con otras entidades.
Actualmente, hay 814 porcinocultores registrados a nivel nacional, 852 granjas y 1,062 registros de movilizaciones porcinas correctamente documentadas y finalizadas.
“La amenaza es grande y tenemos acciones de emergencia y prevención regional; principalmente, inspecciones no intrusivas con unidades caninas y medios de desinfección de todo lo que se mueve en puertos y aeropuertos, sumado a la vigilancia epidemiológica en todos los países”, resaltó Medina.
El fondo de emergencia de apoyo a República Dominicana consistió en aproximadamente US$300 mil, aparte de especialistas en el tema.
Los ministros del continente reunidos durante un foro organizado por el Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura (IICA) afirmaron que la enfermedad puede afectar la estabilidad de la industria porcina del hemisferio, especialmente a los medianos y pequeños productores, por lo que es fundamental el trabajo colaborativo entre los servicios veterinarios oficiales y el sector privado.
Porcicultores en alerta
David Orellana, asesor técnico de la Asociación de Porcicultores de Guatemala (Apogua) expresó que el sector se encuentra preocupado y en alerta, por lo tanto, se han llevado a cabo reuniones porque el sector pertenece a la Comisión Técnica Porcina integrada por el ministerio de Agricultura, la Asociación de Porcicultores de Guatemala, la Facultad de Medicina Veterinaria de la Universidad de San Carlos, el Colegio de Médicos Veterinarios y Oirsa como ente asesor.
Las reuniones son de índole preventivas y se manejan las tres acciones que explicó anteriormente Medina, de Oirsa.
“El factor de riesgo al traer animales vivos es mínimo porque se comercializa con países que no tienen la enfermedad. Estamos preocupados de que aparezca en otro país, pero estamos conscientes y en constante actualización de la información”, aseguró Orellana.
Ayuda la trazabilidad
El Programa Nacional de Sanidad Porcina (Pronasporc) de la Dirección de Sanidad Animal del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Alimentación (Maga) afirmó que la trazabilidad porcina es una herramienta destinada a poder mejorar la salud de los cerdos, ya que a través de esta se puede registrar y dar seguimiento a cada movimiento y registro sanitario a lo largo de las distintas etapas de producción de un cerdo, desde que nace, hasta que llega a su destino final.
Todas las enfermedades consideradas exóticas como es el caso de la PPA, ingresan a través de alimentos contaminados o cerdos infectados, por lo que tener un sistema de trazabilidad correctamente implementado contribuye a evitar el ingreso y propagación de enfermedades como la PPA, afirmó el Maga.
Orellana, de Apogua, comentó que arrancará la fase de la instalación del arete oficial y permitirá en un momento dado el poder controlar las enfermedades que afectan al sector.
“Todos los animales que no posean arete serán considerados de contrabando y son una fuente de riesgo para el ingreso de enfermedades. Para lograrlo se necesita una guía de movilización que se deberá subir en una plataforma digital”, agregó el asesor de Apogua.
El Maga dijo que se considera que las unidades de transporte pueden funcionar como medio de trasmisión de enfermedades al no ser sometidas a un proceso adecuado de limpieza y desinfección, por lo que es de suma importancia el cumplimiento con los distintos registros relacionados a la trazabilidad.
Estos incluyen a personas, establecimientos, identificación de los cerdos, unidades de transporte, conductores, transportistas y traslado de cerdos debidamente autorizados, como se encuentra contemplado dentro del Sistema Nacional de Trazabilidad Pecuaria (SINAT-GT).
Acciones específicas
El Programa Pronasporc del Maga está trabajando de cerca con otras organizaciones internacionales, sector porcino privado y porcinocultores en general, en la profilaxis sanitaria, que consiste en el refuerzo de las medidas de inspección, para evitar el ingreso del virus, en todas las oficinas de Inspección Sanitaria, ubicadas en las aduanas de todos los puertos, aeropuertos y fronteras de ingreso al país. Entre estas:
- Se reitera la prohibición del ingreso de productos y subproductos de cerdo de República Dominicana, Haití y todos los países afectados por la PPA.
- Se extremó la revisión de equipaje de viajeros procedentes de los países afectados, con el fin de evitar que introduzcan productos de origen porcino al país.
- Se intensificó la inspección de cocinas y desechos de buques comerciales, cruceros y aviones, con el fin de sellarlos para su retorno al país de origen o garantizar que se destruyan de manera adecuada.
- Todos los productos que se retienen se destruyen, bajo criterios de extrema seguridad sanitaria.
- Se activó una de campaña de difusión, para que los viajeros no traigan productos de riesgo a Guatemala.
Se trabaja de forma coordinada con los porcicultores del país, tanto a nivel de producción comercial como familiar:
- Se lanzó un programa a través del cual se brinda asesoría y capacitación permanente a los productores de las principales zonas porcícolas del país.
- Se convoca constantemente a los productores a unirse al trabajo de prevención y a que reporten de manera oportuna los casos sospechosos que detecten en sus unidades de producción comercial y familiar.
- Se supervisan las medidas de bioseguridad en granjas a nivel nacional, con la ayuda de los servicios veterinarios oficiales, por medio de la boleta de bioseguridad y el boletín informativo del Pronasporc con el objetivo de concientizar a la población e intensificar la primera barrera de protección en granjas.
- Se está actualizando el censo porcícola y la base de datos de caracterización.
- Se supervisan los principales rastros municipales y privados del país, para llevar un control de las lesiones presentes en los cerdos.
- Informar efectivamente y dejar claro que la enfermedad no representa un riesgo para la población, por lo que el consumo de la carne de cerdo es seguro.
Sugieren prevención
En todo caso, la especialista Monica Davis, oficial veterinaria de la División de Producción y Sanidad Animal del Ministerio de Agricultura de San Vicente y las Granadinas, advirtió que esta enfermedad pone en riesgo los medios de vida de los productores, debido a que tiene fuertes consecuencias sobre el comercio internacional, ya que desencadena restricciones sobre los países afectados.
Davis exhortó a los viajeros a no transportar cerdos ooiproductos porcinos y también a los productores, para tomar medidas de bioseguridad más estrictas de lo habitual para evitar la diseminación de la PPA.
