En junio de 2021 el Tribunal Superior de Justicia de Canarias (TSJC), el padre de las menores mantuvo los cuerpos de sus hijas por varias horas antes de tirarlos al fondo del mar. Además, se supo que habría dejado un misterioso mensaje antes de asesinar a sus hijas.
De acuerdo con medios internacionales, se le practicó la autopsia a Olivia, la niña de seis años. El reporte indicó que, ni ella ni Anna fueron drogadas, algo que se planteó en primera instancia, debido a que no se encontró ninguna sustancia toxicológica en el cuerpo de la menor.
Los encargados de dar seguimiento a ese caso quedaron a cargo de las autoridades del Juzgado de Violencia sobre la Mujer número 2 de Santa Cruz de Tenerife, España, y recientemente recibieron el informe médico forense definitivo de la autopsia realizada a la niña Olivia.
Según el peritaje, se concluyó que Olivia falleció por “muerte violenta”, de etiología médico legal “homicida”, siendo la causa fundamental de ésta “compatible con una asfixia mecánica por sofocación” y la causa inmediata o última “compatible con un edema agudo de pulmón”.
Los registros demostraron que la muerte de la niña fue aproximadamente entre las 19.54 y las 21.00 horas del 27 de abril de 2021, el mismo día de la desaparición de las dos hermanas, supuestamente asesinadas por su padre, Tomás Gimeno, en la actualidad desaparecido, informó el TSJ de Canarias. Además, los análisis de sangre y contenido gástrico realizados por los laboratorios forenses en muestras orgánicas de la pequeña no detectaron presencia alguna de “sustancias de interés toxicológico”.