Después de una caída negativa a finales del 2020, influenciado por la contracción del sector minas y canteras y el Covid-19, a mediados del 2021, la curva alcanzó su pico más alto luego del año de la pandemia, al ubicarse entre 5% y 10%. Y, aunque experimentó una baja, cerró diciembre con un alza positiva.
Los sectores que lideran la recuperación reflejada en el Índice son los de alimentos y bebidas, la agroindustria, la industria hotelera y de restaurantes, aunque aún no se llega a niveles de prepandemia.
Entre los factores determinantes del desempeño del IAI se menciona la recuperación económica, tras el regreso de la movilidad normal en el país, mientras que los patrones de consumo vuelven a su ritmo normal, lo cual se demuestra con que se espera una temporada de Semana Santa muy dinámica, según Paulo de León, director del Central American Business Intelligence (CABI), autor de dicho análisis.
Afecta la inflación
Durante los últimos dos meses, muchos precios se han incrementado y aunque la inflación aún no impacta del todo a los guatemaltecos, el aumento de los costos de producción también comenzará a sentirse en los márgenes de ganancia de los productores.
Esta situación se amortigua con el crecimiento mundial y regional, en especial de los socios comerciales del país, lo que favorece las expectativas para el crecimiento local.
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También perjudica que no haya mayor inversión pública estratégica ni educación productiva, mientras que la certeza jurídica sigue siendo un tema pendiente. La recaudación ha mejorado, pero la calidad del gasto no responde a un modelo de desarrollo integral, ni a una visión de largo plazo del país, se indicó.
Por último, De León dijo que se prevé una desaceleración de la economía mundial para este año, derivado de la alza de tasas de interés por la mayoría de los bancos centrales de las principales economías del mundo. Algo que se viene a sumar a la crisis de precios iniciada en el 2021, con la inyección de dinero, continuada por la crisis de contenedores y la guerra entre Rusia y Ucrania, países de importancia en la producción de commodities de comida, fertilizantes, metales y energéticos.
“Es una situación que precisa trabajar de la mano entre los sectores privado y público, para salir adelante como ha sucedido en otras experiencias”, apuntó Raúl Buscayrol, vicepresidente de la CIG.
