La investigación se llevó a cabo en una zona al norte de las islas de Hawái denominada “la cresta de Liliuokalani” que forma parte del Monumento Nacional Marino de Papahanaumokuakea (PMNM), en la cima de un monte submarino llamado Nootka.
El hallazgo quedó registrado en video, que fue publicado el 29 de abril de 2022, y aunque los investigadores bromearon de que se trataba de la entrada a la supuesta ciudad submarina perdida de Atlantis, en realidad el fenómeno tiene un origen completamente natural.
La realidad es que las “baldosas amarillas” son una formación rocosa que derivaron de la actividad geológica volcánica que se encuentra en las profundidades, provocando que las rocas se fracturaran de manera que se ven completamente “uniformes”.
Según el portal web de Nautilus explican que el fenómeno es un flujo fracturado de roca hialoclastita, una roca volcánica que se forma a partir de las erupciones de alta intensidad y de la que muchos fragmentos se quedan en el lecho marino.
“Las singulares fracturas de 90 grados están probablemente relacionadas con las tensiones de calentamiento y enfriamiento provocadas por las múltiples erupciones en este margen horneado“, indica el comunicado.
El equipo de investigación aprovechó la oportunidad de recopilar el material a través de un brazo robótico y se percataron que era un depósito mineral conformado por óxidos de hierro y manganeso.
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Los expertos indicaron que se trata de un descubrimiento único que permite un mejor entendimiento de las condiciones submarinas de la zona, y cómo las características cambian de una zona a otra.
“Nuestra exploración de esta zona, nunca antes estudiada, está ayudando a los investigadores a profundizar en la vida en las laderas rocosas de estos antiguos y profundos montes submarinos“, afirman los expertos.
Como parte del programa de investigación submarina, Nautilus tiene también como objetivo investigar los microorganismos que residen tanto fuera como dentro de las cuencas oceánicas.
“Estos estudios ayudarán a proporcionar información de referencia sobre las comunidades vivas de los montes submarinos que puede servir de base para las medidas de gestión y conservación”.