El trabajo, también es un recordatorio del engranaje en las dinámicas humanas, donde la comunicación y el reconocimiento de nuestras capacidades puede fomentar nuevas sendas.
No obstante debe tenerse en cuenta que todo proyecto -individual, como lo sería un emprendimiento, o grupal, como sería desde una empresa- puede incluir fortalezas, pero también dificultades que, de conjugarse y atravesarse de forma responsable, pueden llevar al éxito que se pretende.
En la siguiente entrevista, Haydée Tejada quien se desempeña como Directora de Estrategia y Business Operations del Instituto Centroamericano de Administración de Empresas (INCAE) para Executive Education y el Centro de Liderazgo Colaborativo y de la Mujer, nos explica más sobre los desafíos así como las posibilidades de trazar proyectos laborales individuales y de forma organizacional.
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Desde su enfoque de liderazgo que promueve la ética empresarial y el logro del equipo, Tejada comparte algunas recomendaciones sobre cómo abordar iniciativas que mejoren a los propios desarrolladores, sus comunidades y sus equipos de trabajo:
¿Cómo definiría el proceso de liderazgo?
Es la capacidad que nos permite inspirar a las personas a tomar acción. El primer rol que deben tener los líderes es asegurarse que sus equipos posean las habilidades y las herramientas para poder ser exitosos.
Es usual que la visión tradicional de estas personas sea más orientada hacia las jefaturas, pero también se debe entender el liderazgo como algo que nos permita servir a quienes están dentro de los equipos.
Creo que es ideal fomentar el emprendimiento, ya que les da a las personas la capacidad de tener suficiente autonomía o empoderamiento para promover proyectos nuevos en las áreas de trabajo de las compañías, así como lo pueden llegar a hacer personalmente.
¿De qué forma pueden las personas empoderarse si no tienen referentes claros en ese tema?
No todos sabemos cómo empoderar a las personas o cómo delegar esa función para promover la innovación dentro de los equipos. Creo que lo primordial en una estructura laboral es preparar a los equipos y asegurarse que las personas tengan las competencias necesarias.
Es importante el establecimiento de los objetivos para saber cuáles son las metas que tienen las personas dentro del equipo y cuál es el propósito general. A la vez esto ayuda a saber cómo van a ser medidos todos los miembros. Solo así se podrá dar herramientas para que las personas puedan llegar a los objetivos y finalmente así, innovar en el trayecto y empoderarse.
Resulta importante que las personas busquen apoyo de instituciones de educación ejecutiva para que puedan continuar actualizando sus habilidades y además reconozcan que incluso las competencias necesarias para liderar han evolucionado a través del tiempo. La flexibilidad cognitiva, así como la capacidad de desaprender y volver a aprender son vitales ahora.
INCAE ofrece espacios de formación en tres modelos de liderazgo: el personal, de equipos, y organizacional. El primero ayuda a identificar cuáles son las competencias, las fortalezas y las oportunidades de mejora en las personas, el segundo permite realizar un análisis de los grupos de trabajo, y el tercero permite realizar transformaciones dentro de las compañías.
La independencia económica y la autorrealización son elementos que conllevan el emprendimiento. Además de estos, ¿qué otras oportunidades considera que pueden surgir cuando alguien inicia un proyecto laboral autogestionado?
Creo que da la posibilidad de encontrar un sentido y un propósito en las carreras profesionales, así como puede impulsar a que las personas emprendan imaginando su legado.
Muchas veces como líderes en procesos de formación de emprendimientos, nos resulta importante que las personas reflexionen sobre el impacto que podría tener su emprendimiento tanto en sus vidas como en sus organizaciones, su comunidad y en el mundo.
¿Cuáles valores considera deben fomentarse en los equipos de trabajo o desde la persona individual para atender a las necesidades de quienes buscan los servicios de los emprendimientos?
Se debe entender realmente qué quieren los usuarios y cómo encontrarán soluciones con nuestros emprendimientos. Estudios de Forbes indican que el 90% de las empresas nuevas fracasan porque presentan un producto que no está adaptado a lo que realmente quieren los usuarios.
Hay que distinguir entre la pasión y el propósito en un emprendimiento. La pasión es algo que nos mueve como emprendedores, mientras que el propósito tiene que ver con cómo hacemos una unión de lo que genera pasión con las fortalezas y el impacto que se puede generar en los demás.
Analizar el impacto implica entender qué produce valor para los clientes y la comunidad que existe alrededor. Vale la pena preguntarse incluso: ¿Cómo podemos, desde estos emprendimientos, realmente transformar América Latina?
(…) resulta importante que las personas reflexionen sobre el impacto que podría tener su emprendimiento tanto en sus vidas como en sus organizaciones, su comunidad y en el mundo. -Haydée Tejada,Directora de Estrategia y Business Operations de INCAE
Hablemos de empresas establecidas y de sus desafíos. ¿Qué recomendaciones podría dar a los colaboradores que batallan con la urgencia de solventar metas con poco tiempo, recursos y equipos pequeños?
Los cambios a nivel social, político y demográfico que estamos viviendo han provocado nuevas transformaciones dentro de las empresas y pueden sentirse como una crisis. Debemos tener presente que los cambios van a generar siempre sensaciones negativas como la incertidumbre, por esto lo primero que necesitamos es un adecuado manejo emocional.
Si tenemos muchas atribuciones urgentes dentro del trabajo, lo importante es identificar cuáles son aquellas que nos van a ayudar a obtener los mejores resultados. Para lograrlo es necesario que las personas estén bien instruidas y tengan formación, por eso las organizaciones deben enfocarse en el desarrollo del talento ya que eso trae la verdadera ventaja competitiva porque es lo que permitirá enfrentar los nuevos desafíos que surgen.
El desarrollo del talento es fundamental para las organizaciones y se debe asegurar que haya personas preparadas para enfrentarlos y que se otorguen las herramientas para poder atender a los problemas que pueden surgir.
¿Cómo se puede alimentar una relación laboral lo suficientemente humana entre las distintas personas de un mismo equipo?
Tenemos que ver el trabajo desde una mentalidad de crecimiento en la que reconocemos que las personas, las habilidades y las actitudes de las personas pueden evolucionar. Esto requiere atención, esfuerzos y una evaluación a las competencias desde los líderes de organizaciones o de equipo.
Es un punto de inicio que nos presenta el camino que podríamos recorrer. Por otro lado, es importante que los líderes reconozcan las necesidades emocionales de las personas que colaboran dentro de la organización y que entiendan que se trata de seres íntegros y auténticos.
¿Cuál cree que es la importancia de reconocer los desafíos o las carencias informativas sobre cómo desempeñarse laboralmente?
Es necesario saber cuáles son nuestras oportunidades de mejora, así como nuestras debilidades para saber cómo direccionar nuestras evaluaciones que nos servirán para hacer un cambio de perspectiva y trazar una ruta hacia la mejor versión de nosotros, y nuestra organización.
A la vez, esto nos permite identificar cuáles son nuestras fortalezas, debilidades y oportunidades que tenemos para obtener así mejores resultados, y una mayor satisfacción de nuestros objetivos.