En la grabación se pudo ver el momento en el que las autoridades colocaron al futbolista de 27 años de espaldas contra el patrullero. Mientras uno comenzó a revisarlo de pies a cabeza, sus dos compañeros mantenían sus armas en alto apuntando dentro del vehículo para evitar una fuga.
Sin embargo, mientras seguían registrando al futbolista que pertenece al Chelsea (que jugó cedido la última temporada en el Milan), uno de los oficiales bajó su arma, rodeó el automóvil que habían interceptado y se dirigió hacia su compañero. Ambos comenzaron a dialogar mientras uno de ellos continuaba quitándole cosas de los bolsillos a Bakayoko.
Pero en cuestión de segundos, uno de los policías pareció haber recibido la información de que no se trataba del hombre que estaban buscando, sino que a quién estaban registrando era a un futbolista del Milan.
Su cara lo decía todo. Fue recién ahí cuando dejaron hablar al deportista, quien comenzó a explicarle lo que estaba ocurriendo. El oficial soltó automáticamente al joven y pareció pedirle disculpas con una palmada en la espalda.
“El allanamiento se debió a un tiroteo ocurrido en la zona en las horas previas, y los dos sospechosos eran dos hombres en una camioneta que se ajustaban a la descripción, uno de los dos tenía una camisa verde”, detalló horas más tarde un comunicado de la policía estatal con respecto a lo ocurrido en la carretera de la zona de Porta Garibaldi.
Según la Gazzetta, la Policía se expresó luego de recibir acusaciones de racismo en las redes sociales: “Estos comentarios están fuera de lugar, el control se disparó porque Bakayoko y el otro pasajero correspondían perfectamente, por casualidad, a las descripciones, y obviamente terminó cuando se percató de que había detenido a una persona que no lo hizo”. El citado diario italiano detalló que, tras un tiroteo, la Policía estaba rastreando a unos ciudadanos senegaleses por “cuestiones de tráfico de drogas”.
En lo que respecta a lo deportivo, Tiemoué Bakayoko está a travesando un momento decisivo en su carrera después de arribar al Chelsea en 2017 por 40 millones de euros. Tras su llegada a Londres, el mediocampista acumula cuatro sesiones consecutivas y, al no estar en los planes de Tuchel, podría ser vendido en este mercado de transferencias.
El futbolista de 27 años cuenta con dos candidatos. Por un lado, el Valencia de Gennaro Gattuso, quien lo dirigió durante su primera salida a préstamo al Milan, y por el otro el Olympique de Marsella de Igor Tudor, una opción más tentadora ya que de unirse a ellos podrá disputar la Champions League. Cabe destacar que antes de emigrar a la Premier League, el futbolista francés de raíces marfileñas había iniciado su carrera en el Rennes con un paso posterior por el Monaco.