Julieta Emilia Cazzuchelli, nombre de pila de la artista de 28 años, que se encuentra en Puerto Rico para participar en los Premios Juventud, opina que es algo “todavía muy nuevo” el hecho de “hablar más libremente del movimiento” de mujeres en la música urbana.
“Antes se consideraba algo que debería existir pero que no existe, creo que recién es ahora que estamos todos siendo conscientes de por qué luchamos y por qué es importante la sororidad”, subraya.
Como mujer hay que tener “cierta fortaleza a la crítica”
La cantante, que recientemente publicó su álbum Nena Trampa, compuesto y grabado en Puerto Rico, afirma que como mujer “hay que tener otra actitud y cierta fortaleza a la crítica”.
“A veces no son ni siquiera los colegas, que también sucede, a veces es mucho el público, el público es bastante ‘hardcore’ (duro)”, comenta la autora de éxitos como Nada (2019) junto a los puertorriqueños Lyanno, Rauw Alejandro y Dalex.
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A su juicio, cuando las mujeres se involucran en géneros musicales como el trap o el reguetón, “siempre hay mucha más crítica, la crítica es mucho más elevada y hay que estar preparado para eso”.
Durante los Premios Juventud del jueves 21 de julio, Cazzu participará en la actuación musical de la puertorriqueña Kany García, quien va a ser reconocida como “Agente de Cambio” por su compromiso y activismo en la lucha por la igualdad.
“En el momento en el que ella hizo su música me imagino un contexto bastante complicado así que pienso que es súper valioso”, asegura sobre el papel de Kany García en abrir camino a las nuevas generaciones de mujeres en la música.
Las letras de muchas canciones de sus álbumes Error 93 (2019) y Nena Trampa (2002) van cargadas de feminismo, una temática que seguirá presente en sus composiciones porque “la música tiene mucho potencial y está bueno a veces usarla para decir cosas que uno considera que deberían ser escuchadas”.
Generar sentimientos más que números
Con dos nominaciones en los Premios Juventud, entre ellas “Artista femenina en ascenso”, la cantante dice que le gusta “generar sentimientos más que generar números”.
“Si la gente se tatúa el disco o alguna de las canciones preferidas, esa es como la traducción de éxito para mí”, afirma, aunque los números también son reveladores: más de 7.3 millones de oyentes mensuales en Spotify y unos 10.5 millones de seguidores en redes sociales.
Con Nena Trampa, que a menos de un mes desde su estreno había acumulado más de 5 millones de reproducciones en todas las plataformas digitales de música, Cazzu ha tratado de “buscar una diferencia, un sonido nuevo”.
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“La gente puede sentirme a mí, conocerme a través de mi disco porque soy yo escribiendo”, comenta sobre un álbum que incluye temas como Jefa, Isla Velde y La trampa.
También tiene el objetivo de “reanimar un poco el trap”, los géneros por los que la gente la conoció, que estuvieron -agrega- “un poco calmados ya que el reguetón tomó mucha fuerza”.
No obstante, declara amar el reguetón y su cuna, Puerto Rico, ya que artistas puertorriqueños del género como Bad Bunny, Lyanno o Rauw Alejandro le “abrieron las puertas muy rápido” y ayudaron a lanzar su carrera a nivel internacional.
Argentina aporta rebeldía
“La Jefa del Trap” forma parte de la ola de música urbana que llega pisando fuerte desde el sur del continente americano, en concreto de Argentina.
“Yo creo que nosotros sobre todo aportamos este poquito de rock que está en nuestro ADN (…) y es muy rebelde, muy libre, creo que la gente cuando lo ve desde fuera ve que realmente hacemos lo que queremos”, afirma.
Considera que ellos hacen música con “menos prejuicios” y que por las diferencias culturales y sociales traen “un aporte nuevo”: “Yo le digo como más frío, más del sur”.
Nicki Nicole, Trueno, Tiago o María Becerra son otros de los exponentes argentinos que han demostrado “el talento” del país, según Cazzu, que insiste en que “Argentina se merecía esta atención”.
