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Verificamos por usted: ¿Se deteriora la libertad de prensa en Centroamérica?
En Centroamérica, periodistas que investigan, fiscalizan y revelan abusos de poder y posibles casos de corrupción se enfrentan a amenazas, difamaciones y ataques.
Periodistas guatemaltecos protestan contra la detención de José Rubén Zamora, presidente del diario El Periódico, frente al Palacio de Justicia de Ciudad de Guatemala, el 30 de julio de 2022. (Foto Prensa Libre: Johan Ordóñez / AFP)
En la última década misiones de observación y defensores de derechos humanos advierten un retroceso en la libertad de prensa en Centroamérica. Cada vez más, las y los periodistas que cuestionan al poder se enfrentan a amenazas y difamaciones que buscan restringir su labor investigativa.
Según el panel de expertos de Reporteros Sin Fronteras, la libertad de prensa es la posibilidad que tienen los periodistas para producir y difundir informaciones en aras del interés general sin ningún tipo de interferencia política, económica, legal, social y sin arriesgar su seguridad física y mental.
En Centroamérica, países como Honduras, Guatemala, El Salvador y Nicaragua encienden las alarmas ya que en el último año se han intensificado los ataques hacia periodistas que investigan y revelan actos de corrupción y abusos en el poder.
“El periodismo investigativo está siendo atacado. A algunos les duele que haya periodistas que tomen un tema, lo profundicen y lo investiguen. Es esto lo que molesta a quienes detentan el poder porque tenían la falsa idea de que no serían descubiertos al hacer sus maniobras sucias”, afirma Frank La Rue, exrelator para la libertad de expresión de Naciones Unidas e integrante de Fundamedios.
En la región hay una tendencia dictatorial, afirma La Rue, que se caracteriza por la pérdida de pesos y contrapesos en los estados y el uso de las legislaciones vigentes para arremeter contra periodistas, operadores de justicia y defensores de derechos humanos.
¿De dónde salió la información?
Tras la detención en Guatemala de José Rubén Zamora, presidente de elPeriódico, múltiples organizaciones, nacionales e internacionales, solicitaron que sea liberado y expresaron su preocupación por el estado del derecho de la libertad prensa. “Las autoridades deben liberar de inmediato y retirar los cargos contra José Rubén Zamora y abstenerse de abusar de los procesos penales para intimidar a la prensa”, dijo el subdirector del Instituto Internacional de Prensa, Scott Griffen. De igual forma, Wola informó en un comunicado que condena la “detención y persecución penal del reconocido periodista guatemalteco José Rubén Zamora y de la auxiliar fiscal Samari Carolina Gómez Díaz, así como el intento del Ministerio Público de ahogar financieramente a elPeriódico”, según un comunicado. La Unión Europea expresó que el arresto Zamora “genera serias preocupaciones sobre la libertad de prensa en Guatemala”.
¿Cuál es el contexto?
Luego de ser capturado el viernes, Zamora fue enviado a Mariscal Zavala en lo que se realiza la audiencia de primera declaración, en la que se decidirá si es ligado a proceso por los cargos que se le imputan o no. La cita estaba programada inicialmente el lunes en la mañana, pero se suspendió porque el Juzgado de Turno no trasladó el expediente al Juzgado Séptimo y porque tampoco se trasladó al periodista a la Torre de Tribunales. El Ministerio Público no ha revelado detalles del caso en el que se incrimina a Zamora y en lugar de ello lo clasificó bajo reserva. El fiscal a cargo, Rafael Curruchiche, aseguró que se trata de una detención por presunto lavado de dinero "en su calidad de empresario, mas no por su actividad periodística". Sin embargo, diversos hechos contradicen esta afirmación. Gerson Ortiz, jefe de redacción de elPeriódico, informó que el allanamiento en las oficinas de elPeriódico duró 16 horas y esto amenazó que circulara libremente. Si lo hizo, fue porque el matutino se imprimió fuera de las oficinas centrales. Además, el medio ha informado que sus cuentas bancarias fueron embargadas, lo que amenaza el pago de nómina de los trabajadores. El embargo fue confirmado por el MP. “Las cuentas bancarias de elPeriódico fueron embargadas a solicitud de la Fiscalía Especial Contra la Impunidad (FECI), con la única intención de paralizar las finanzas del medio de comunicación, evitando poder cumplir con sus obligaciones laborales como contractuales”, expresó el medio en una publicación.
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Verdadero
Información cierta y confirmada por fuentes confiables.
Estudios y misiones de observación evidencian que la captura de Zamora no es un hecho aislado. En Guatemala, la Asociación de Periodistas de Guatemala (APG) contabiliza 350 agresiones contra periodistas desde que tomó posesión el gobierno del presidente Alejandro Giammattei. “Estas cifras reflejan una parte de la violencia y restricciones hacia el ejercicio periodístico, debido a que hay también un sin número de hechos que no se dan a conocer”, manifestó la APG. La región de Centroamérica tampoco es ajena a estas agresiones. Según la Clasificación Mundial de la Libertad de Prensa que elabora Reporteros sin Fronteras, Guatemala ocupa el puesto 124 de 180 países evaluados, lo cual clasifica al país en una situación “difícil” y retrocedió ocho puestos con relación a la evaluación anterior. El Salvador ocupa el puesto 111, con una situación “difícil”, mientras que Nicaragua se ubica en el 160 y Honduras en el 151, ambos calificados como “muy grave”. Frank La Rue, exrelator de libertad de expresión, considera que el denominador común en estos países es el uso de la ley para restringir derechos de periodistas. “La constante es la intimidación a través de la ley misma. La ley, que antes era un instrumento de defensa para luchar por los derechos humanos, ahora se voltea contra las personas”, dijo. Reflejo de esto es la captura en Guatemala de Zamora, o la aprobación de reformas del Código Penal en El Salvador que prohíben a los medios de comunicación reproducir mensajes que se presuma fueron elaborados por pandillas para generar zozobra. Sin embargo, por la forma en cómo está redactado podría prestar para restringir y castigar el ejercicio periodístico, advierte Susana Peñate, relatora de libertad de expresión de la Asociación de Periodistas de El Salvador. “No es que el periodismo se encargue de difundir mensajes de pandillas, sino busca evidenciar el control que estos grupos criminales tienen en los territorios. Hablar de ese control o entrevistar a familiares de personas detenidas durante el régimen de excepción a quienes el gobierno acusa de pandilleros sin haber sido vencidos en juicio significa arriesgarse a ser apresados hasta diez años”, dijo Peñate. Una situación similar se vive en Nicaragua, donde más de 30 medios de comunicación y espacios informativos han sido forzados al cierre por presiones políticas, según el movimiento de Periodistas y Comunicadores Independientes de Nicaragua. “Estas agresiones a la libertad de expresión y libertad de prensa solo agudizan el profundo deterioro de los valores y principios que deberían sostener a la sociedad nicaragüense y no contribuyen al establecimiento de la paz que tanto pregona el gobierno", expresó el PCIN en un comunicado.