La reflexión de González Ricci tiene dos facetas en el ámbito público: como diputado del Congreso en la séptima legislatura y como titular del Ministerio de Finanzas en la presente administración de Gobierno. Pero también, ha realizado carrera en la banca privada y para organismos financieros internacionales.
Sobre él recaerá la administración y ejecución de la política monetaria, cambiaria y crediticia para los próximos cuatro años. En la historia de la banca central, pocos presidentes no han sido de carrera y él es uno de ellos.
Las luces
Hugo Maúl, analista del Centro de Investigaciones Económicas Nacionales (Cien), aseguró que se le reconoce que le tocó una situación difícil por la pandemia, no hubo una preparación y anticipación.
Pese a que el 2020 se pudo mantener el déficit fiscal, no se salió de control que era uno de los temores que se tenían, así como que se experimentó una mejora en la recaudación tributaria, que ayudaron. Percibe un respeto y planificación de los programas que dejó el exsuperintendente de la SAT Abel Cruz Calderón y los que se quedaron están cosechando una planificación de mediano plazo.
Los diputados Óscar Chinchilla y Carlos Barreda, con quien González Ricci ha interactuado por más de una década y que lo conocen de cerca, opinaron que, en el Ministerio de Finanzas, logró articular un buen equipo de trabajo que lo llevó a implementar durante la crisis sanitaria.
Chinchilla destacó que Gonzalez Ricci es una persona muy tenaz y perseverante, y buscó este espacio para poder dirigir la banca central, que trabajó para llegar a este cargo, y que es el más importante para preservar la estabilidad política del país.
Las sombras
Sin embargo, Barreda afirmó que no cuenta con una experiencia en materia de política monetaria, cambiaria y crediticia desde el punto de vista de Estado, y su experiencia ha sido en el tema financiero-empresarial, y aunque ha participado en las reuniones de JM se le puede apreciar la falta de experiencia técnica y conocimiento de la política económica, y su formación base y desempeño no le dan las credenciales de experiencia para el manejo de la política macroeconómica.
Remarcó que se puede mantener a un presidente de la banca central más con una orientación política y no técnica.
Chinchilla aseguró que en la bancada Creo se destacó como diputado, pero que no cuenta con experiencia en banca central, y como ministro de Finanzas no se quiso involucrar mucho en lo estratégico y delegó a sus viceministros.
“Fuimos compañeros y formulamos varias iniciativas en conjunto, pero desconozco el trabajo que él tenga en banca central o en lo macroeconómico para lograr mantener la estabilidad; habría que ver el equipo que llevará, porque tengo entendido que hay muchas personas que se están jubilando del banco central”, expresó.
Maúl manifestó que en el Minfin existen situaciones estructurales como la eficiencia y calidad del gasto, así como todas las denuncias alrededor de la obra pública que no son fácil de resolver, pero quien llega a esos puestos les toca cargar con ampliaciones presupuestarias.
“El hecho es que, en términos de la efectividad de calidad del gasto y control de la corrupción Guatemala no ha tenido avances importantes con respecto a como él lo encontró”, concluyó Maúl.
Principales indicadores que deja
- Al 31 de agosto el saldo de la deuda pública es de Q213 mil 952 millones, y la recibió en 2019 en Q157 mil 325 millones.
- La deuda bonificada la deja en Q174 mil 862.49 millones e inició su gestión con Q119 mil 017.87 millones.
- El saldo de la deuda pública con respecto al PIB la deja 29.8% al 31 de agosto y la recibió en 26.5%.
- La ejecución de gasto público es de 66.54% con un devengado de Q74 mil 871 millones.
- Inició con un presupuesto inicial de Q106 mil 229 millones y el Congreso aprobó modificaciones por Q6 mil 288 millones para un presupuesto vigente de Q112 mil 518 millones.
- De enero del 2020 a agosto del 2022 tuvo gastos totales en Administración Central por Q247 mil 854 millones e ingresos totales por Q208 mil 55 millones.
Fuente: Reporte de Operaciones de Crédito Público/Sicoin
Hoja de vida
- Álvaro González Ricci
- Fecha de nacimiento: 19/febrero/1967
- Edad: 54 años
- Profesión Licenciado en Mercadotecnia por la Universidad Rafael Landívar de Guatemala
- Trabajó entre 1989 a 1996 en varios puestos directivos de Grupo Financiero del País, entre 1997 a 2006 como directivo de Citibank y del 2006 al 2011 como consultor financiero en créditos de consumo y estructuración de proyectos.
- Del 2012 al 20016 fue diputado y del 2016 consultor para organismos financieros internacionales. En 2020 asumió la titularidad del Minfin.
El perfil ideal
La Ley Orgánica del Banco de Guatemala (Banguat) establece en el artículo 28 nombramiento y elegibilidad para este cargo, y en la cual se resalta que el “presidente y vicepresidente deberán ser personas de reconocida honorabilidad y notoria preparación y competencia económica y financiera”.
Prensa Libre consultó a exfuncionario de la banca central, y otros que han tenido relación con la política económica sobre cuál es la característica que debe tener un presidente del Banguat.
Maria Antonieta del Cid, expresidenta del Banguat, remarcó que las personas que lleguen a la JM deben tener una notoria experiencia en el ámbito económico y financiero, que es un aspecto fundamental, sobre todo ahora por la coyuntura internacional y local complicada, que trae impacto para todos los países del mundo.
“La capacidad de poder preparar con anticipación las herramientas ante diferentes escenarios que se pueden presentar es fundamental. El Banguat se ha caracterizado por tener un equipo técnico de carrera y es importante que ese equipo se mantenga, ya que cuenta con experiencia, nivel académico y profesional ha hecho que se presenten propuestas técnicas que ahí surgen a la Junta Monetaria y tomar decisiones sean fundamentadas e informadas”, destacó del Cid.
Otro aspecto que remarcó es la independencia de la banca central y la autonomía que establece en la Ley, y la persona que este a cargo debe velar por esa independencia.
Edwin Matul, exgerente general de la banca central, expresó que se debe tener conocimiento de macroeconomía, finanzas y en gran medida entender el manejo de la política monetaria.
Miguel Ángel Moir, extitular de la Secretaría de Planificación y Programación de la Presidencia (Segeplan), aseguró que un presidente del Banguat debe tener una perspectiva de cómo mantener una estabilidad macroeconómica y una buena política para mantener el control de precios.
Tener una capacidad de manejar, consensuar y complementar la política económica del país, para que esa perspectiva del crecimiento económico no solo se quede en esa dimensión, sino que la riqueza se pueda redistribuir en el país para generar desarrollo.
Otra cualidad natural es que debe ser un estratega, capacidad analítica, y hasta cierto punto de poder establecer puentes con diferentes sectores, y esa capacidad para poder actuar con el sector privado, para encontrar una estrategia efectiva para poder alcanzar un crecimiento del 6% del PIB.
Para Moir, si esas condiciones no se dan, se corre ser expuesto en caer en un mal manejo de la política cambiaria, el tipo de cambio podría afectarse en el corto plazo, y es fundamental trabajar el tema de las de la parte crediticia, ya que se está en el límite de la frontera del endeudamiento público, y evitar una ruta de lo que se está observando en El Salvador y Costa Rica en cuanto al crecimiento de la deuda pública.
También de mantener activo el funcionamiento de la JM, y eso implica conocimiento, capacidad técnica y tener claro cómo se está comportando la economía del país, dado que el Gabinete Económico no tiene direccionalidad, hay que buscar un punto de encuentro para empatar la política económica con la monetaria.
