El Foro Público de la OMC es un evento anual que ofrece a quienes participan la oportunidad de debatir sobre los elementos que suceden en el comercio mundial, así como para proponer maneras de mejorar el sistema multilateral de comercio. Este año se congregaron más de 3,500 participantes procedentes de diversos ámbitos, que van desde las entidades y funcionarios gubernamentales y no gubernamentales hasta la comunidad empresarial y la academia.

Este año, el Foro se realizó del 27 al 30 de septiembre, con el lema “Hacia una recuperación sostenible e inclusiva; de la ambición a la acción”. El título es muy apropiado en este momento, ya que el mundo se enfrenta a múltiples desafíos, por lo que se vuelve aún más urgente pasar de la ambición a la acción.

Durante las sesiones, los jefes de las organizaciones internacionales, los representantes del sector privado y el mundo académico impulsaron debates sobre cómo las posibilidades de transformación que ofrece el comercio internacional forman parte de la solución a los problemas que afronta la humanidad y, sobre todo, lo que se debe hacer para fomentar una recuperación sostenible e inclusiva, tras la pandemia y las tensiones geopolíticas.

Los panelistas también debatieron sobre la manera en que la OMC puede ser un catalizador para la transición global hacia una economía verde y contribuir a la transformación tecnológica garantizando que todos los países, las empresas y los particulares pueden aprovechar los beneficios de la transformación digital.

Todo esto basándose en las lecciones aprendidas de la pandemia del covid-19, la crisis climática, el aumento de las tensiones geopolíticas y las amenazas para la seguridad alimentaria mundial, en el foro también se examinaron formas de mejorar la preparación para futuras pandemias y otras conmociones.

Más de un millón de jóvenes del mundo viven en estados frágiles y afectados por conflictos, donde las oportunidades de educación y empleo son extremadamente limitadas y el comercio debe desempeñar un papel sustancial para romper los círculos viciosos de pobreza, frustración y conflicto en estos países y aumentar las oportunidades para los jóvenes.

Sobre todo los países pobres que dependen en gran medida de las exportaciones de productos básicos suelen correr un mayor riesgo de conflicto. En la medida en que se pueda hacer del comercio un instrumento para impulsar el crecimiento y la diversificación se le estará dando a la paz una mejor oportunidad.

También se debe tomar en cuenta que la propiedad intelectual ofrece oportunidades para los jóvenes. Los jóvenes artistas que son cantantes, escritores y diseñadores de moda en zonas de conflicto pueden beneficiarse de los derechos de propiedad intelectual, que juegan un papel fundamental en el sistema multilateral de comercio. Representantes de la Cámara Internacional de Comercio instaron a la OMC a desempeñar liderazgo para garantizar acceso a las cadenas de suministro eficaces.

La pandemia, el cambio climático, inclusión, comercio electrónico y digitalización de la economía dejan claro que los componentes que debe incluir la agenda para construir un mundo mejor y accesible para todos es un desafío ambicioso que podría mostrar los primeros pasos concretos si se lograra avanzar en la reformulación de la infraestructura institucional global.

Lo cierto es que, durante los cuatro días, representantes de grupos de la sociedad civil, académicos, empresarios, estudiantes, miembros de la OMC y funcionarios de todo el mundo, incluidos jefes de Estado, ministros y parlamentarios, participaron en las sesiones en las que se abordó buena parte de las prioridades establecidas para el evento.