Rolando Esteban, uno de los manifestantes, que participó en la caminata pacífica, dijo que muchas de las tareas que realizan para ganar el sustento diario, vienen desde tiempos inmemoriales, como la transportación de personas, el cambio de moneda y otras. Últimamente, dijo, hemos sido amenazados, reprimidos e intimados por las autoridades, indicando que realizamos trabajos ilegales.
Tricicleros, balseros, cambistas de moneda y vecinos de diferentes comunidades del municipio fronterizo participaron en esta pacífica caminata que se inició en el kilómetro 250 de la ruta al Pacífico y acceso a la población para concluir en el Centro Cultural Erik Suñiga, en donde intervinieron varios de las participantes, expresando su preocupación porque últimamente ha venido siendo intimidados, reprimidos y amenazados, porque autoridades argumentan que se dedican a trabajos que se pueden considerar ilegales.