Ayer, el presidente de Comunicaciones, Pedro Portilla, y el de Municipal, Gerardo Villa, trataron de revocar la decisión de la Federación de Futbol en cuanto a jugar a puerta cerrada, y por más de dos horas se reunieron con el presidente de la Fedefutbol, Brayan Jiménez.
Se mantienen firmes
Al filo de las 18 horas, los presidentes de ambos clubes salieron notablemente molestos y dijeron que la Federación anunciaría la decisión.
“Solo les puedo decir que los partidos serán jueves y domingo“, dijo Villa, quien salió de la cita junto a Portilla.
Jiménez dijo que era necesario dejar la decisión de su entidad. “La Federación mantiene la postura; no es una sanción para ninguno de los equipos, estamos manejando el tema contra la violencia. Los dos presidentes entendieron la postura de la Fedefutbol”, aseguró.
“Todos estamos tristes porque jugaremos a puerta cerrada. Entraráúnicamente la gente que tiene que estar relacionada al partido“, refirió Jiménez.
Los clubes dejarán de percibir cerca de Q1 millón en venta de entradas para los encuentros.