El sospechoso identificado como Jairo Joel Champet Chay, de 21 años, enfrenta cargos de homicidio y maltrato contra personas menores de edad, según la orden de captura.
Las autoridades informaron que el imputado fue localizado en el municipio de Cuyotenango, en el mismo departamento, tras efectuar una serie de allanamientos en tres localidades.
Durante el operativo, se incautaron teléfonos celulares, anillos, manoplas y “cualquier otro objeto ilícito procedencia” que, según el informe de la PNC, se utilizaron para planificar el hecho en el cual causaron la muerte al menor Celso Enrique Girón Ramos, quien falleció el pasado 22 de mayo.
EN ESTE MOMENTO
“Bautizos y sobrenombres”
El estudiante de 17 años cursaba el primer año de una carrera en un Instituto Técnico, pero según su familia, fue víctima de un grupo de exalumnos durante un “bautizo”, una práctica que según denuncias de otros estudiantes y como reconoció un director educativo de la localidad, ha desencadenado violencia y “lleva décadas”.
Los familiares de la víctima se enteraron de que el menor había sido ingresado al Hospital de Mazatenango por una llamada telefónica, al llegar al centro se les notificó que Girón Ramos había muerto. Según el reporte de los bomberos y testigos en el hospital, el cuerpo del menor tenía supuestos hematomas visibles.
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La madre del joven, quien exige justicia, denunció que las autoridades del plantel tenían conocimiento de los “sobrenombres”, los supuestos motes que los estudiantes reciben después de ser “bautizados”.
Familia denuncia
Uno de los alumnos, denunció bajo anonimato los supuestos abusos de los que eran víctimas por alumnos egresados del mismo plantel. Según relató, las agresiones iban desde insultos hasta los golpes en servicios sanitarios o “fuera de las cámaras”.
La familia sospecha de un grupo de cinco estudiantes antiguos denominados “Los Abuelos”, de quienes hay antecedentes por este tipo de prácticas de “bautizos”. Algunos de ellos, según la madre del menor, ya son “grandes” y “padres de familia”.
Hipótesis
La Fiscalía de distrito de Suchitepéquez hizo referencia en su momento de dos hipótesis para la investigación por la muerte del estudiante. La primera por un golpe tras una supuesta caída de un muro, y la otra relacionada al ingreso de “personas desconocidas” que lo habrían sacado del plantel y le habrían golpeado.