En la grabación, de corta duración, un hombre lee un comunicado en una mesa rodeado de un nutrido grupo que exhibe fusiles y otras armas de guerra y, con su boca tapada por un pasamontañas, se escucha decir que el asesinato es supuestamente por hacer recibido dinero del crimen organizado para la campaña electoral y no cumplir lo prometido.
Esta voz también lanza una advertencia sobre el especialista en seguridad Jan Topic, otro candidato presidencial que, al igual que Villavicencio, es enfático en ofrecer una lucha frontal contra el crimen organizado y el narcotráfico, al que el Gobierno achaca en gran medida el auge de la inseguridad en Ecuador y de los homicidios.
Esta banda dice ser parte de “Los Lobos”, una de las bandas criminales más numerosas que operan en Ecuador y unas de las causantes de la crisis de seguridad que atraviesa el país, así como de la serie de masacres carcelarias donde han sido asesinados más de 400 presos desde 2020 en enfrentamientos entre grupos criminales, que se disputan el control interno de las prisiones de Ecuador.
“Los Lobos”, así como otras bandas de crimen organizado que operan en Ecuador como “Los Tiguerones” o “Los Choneros”, tienen entre sus negocios ilícitos principalmente el narcotráfico y las extorsiones, según las autoridades.
El grueso de esa violencia criminal se da principalmente en la costa de Ecuador, por donde pasa una de las principales rutas del narcotráfico, que ha hecho de los puertos ecuatorianos grandes trampolines para enviar a través del comercio marítimo grandes cantidades de cocaína a Europa y Estados Unidos.
Video difundido en redes muestra a un grupo de encapuchados armados que se autodenominan Los Lobos y se atribuyen la muerte del candidato presidencial ecuatoriano Fernando Villavicencio. pic.twitter.com/5XvVvm6Dvi
— RT en Español (@ActualidadRT) August 10, 2023
El incremento de homicidios hizo que Ecuador batiese el récord de muertes violentas en 2022 con una tasa de 25.32 por cada 100 mil habitantes, la mayor de su historia.
El asesinato de Villavicencio al ser disparado a la salida de un mitin en la tarde del miércoles 9 de agosto, en Quito, ha conmocionado y consternado a Ecuador, y ha teñido de sangre la carrera presidencial de estas elecciones extraordinarias convocadas para el próximo domingo 20 de agosto, donde la campaña gira en torno a esta crisis de seguridad.
Villavicencio había denunciado en semanas anteriores amenazas de muerte en su contra, en medio de una preocupación generalizada en el país por la seguridad de los candidato, luego de los recientes asesinatos también a tiros del alcalde de Manta, Agustín Intriago, y de un candidato a asambleísta por la provincia de Esmeraldas.
El atentado dejó al menos nueve heridos, entre ellos una candidata a asambleísta y dos policías, y uno de los atacantes murió supuestamente por heridas tras intercambiar disparos con el personal que daba seguridad a Villavicencio.
Hasta ahora hay al menos seis detenidos por su presunta relación con el atentado, tras varios allanamientos realizados por la Policía en dos barrios de la capital ecuatoriana.
El presidente de Ecuador, el conservador Guillermo Lasso, que no se presenta a la reelección en estos comicios, ha decretado tres días de luto nacional y un estado de excepción por 60 días a nivel nacional, para el despliegue de militares por todo el país que ayuden a resguardar la seguridad para lo que resta del proceso electoral.