Documentos a los que Prensa Libre tuvo acceso evidencian que hay facturas que no han sido canceladas con fecha de enero pasado, y hay deudas con empresas que superan el medio millón de quetzales.
Esto ha llevado a que proveedores frenen la entrega de productos al hospital hasta que sea haga efectivo el pago, es el caso de un proveedor de carne de res que tomó la decisión de parar todos los despachos a partir de este mes; semanalmente le facturaba al centro asistencial no menos de Q75 mil.
El representante de la empresa señala que durante el año mantuvieron las entregas de manera puntual, y mostraron disposición de apoyar al nosocomio hasta donde sus propios recursos lo permitieron. Sin embargo, ese impago les impide tener liquidez económica para comprar las cabezas de ganado que necesitan para poder abastecer de carne a otros clientes.
“No he autorizado más despachos por la falta de pago, porque el hospital incumplió en el monto que habían indicado que pagaría”, dice. La semana pasada les cancelaron unas facturas, pero quedan pendientes otras que suman más de Q500 mil.
Destaca que es la primera vez, en lo que lleva proveyendo al Hospital Roosevelt de carne, que el atraso en los pagos se ha prolongado más de seis meses, pues lo usual son dos a tres.
En ese punto coincide otro proveedor de productos alimenticios como Incaparina, aceite, harinas, azúcar y huevos, entre otros, a quien hasta hace dos semanas comenzaron a abonar la deuda que se ha ido acumulado desde mayo.
“Este año ha sido el más cardíaco porque hay facturas que llegaron a cinco y seis meses de crédito, y en productos alimenticios eso no había sucedido”, agrega, y por dicha situación suspendió las entregas al hospital a mediados de noviembre, pero sabe que otros proveedores pararon el abastecimiento un mes antes.
La respuesta que han recibido los proveedores por parte del hospital es que no se le ha cancelado la deuda porque no cuentan con el presupuesto necesario para hacerlo.
Productos contados
Los productos cárnicos que ingresaron a la bodega de alimentación del hospital Roosevelt en noviembre fueron escasos. En las primeras tres semanas, por ejemplo, hubo salchichas, huevo, jamón, longanizas, algunos cortes de carne de res y cerdo. No hubo pollo ni lácteos.
Mientras que en los últimos días solo entraron salchichas y falda de res.
Además, entró limón, melón, naranja y papaya, también chipilín y cilantro, perulero, remolacha, tomate y zanahoria, de una lista de 17 productos de frutas y verduras.
En diciembre solo han ingresado salchichas, arveja, cebolla, elote, güicoyitos y güisquil.
Pagos atrasados
Pese a que los proveedores de alimentos han dejado de abastecer al Hospital Roosevelt, el doctor Zagreb Zea, presidente de la Junta Directiva del centro asistencial, asegura que continúan alimentando a los pacientes y que se ha cumplido con los requerimientos nutricionales de las mil 100 personas que están en encamamiento.
Agrega que sí hay una deuda con los proveedores, incluso con los que suplen de medicamentos y otros insumos, pero esto siempre ocurre en los últimos meses de cada año, por la falta de cuota que debe entregarles el Ministerio de Salud. Pero es la primera vez que esta situación alcanza a quienes suministran de alimentos al hospital.
“A todas luces se sabe que hay deuda, pero no se ha visto así de comprometida la comida”, dice Zea.
De acuerdo con el médico, este jueves sostuvieron una reunión con las autoridades del nosocomio y les indicaron que esta semana se firmaron 75 cheques para hacer el pago a las empresas.
“Sí hubo un atraso en el pago a los proveedores de carne, pollo, huevos, pero esta semana esperamos que se subsane esto con los cheques que se firmaron a los proveedores en esos rubros”, dice el médico.
Menciona que fue a partir de septiembre que el pago de deuda comenzó a atrasarse más de lo habitual, de continuar esta situación y si las empresas dejan de suplir de productos al hospital, la alimentación de los pacientes se verá comprometida en los próximos días.
“Si llegamos a un punto en donde ya no despacharan nada, pues claro que afectará, pero no vamos a dejar que eso ocurra, porque siempre estamos pendientes de que se entreguen todos los productos. Estoy tranquilo porque esta semana ya se está pagando a los proveedores de alimentos”, agrega Zea.
Por otro lado, mencionó que en el Hospital Roosevelt también se han tenido inconvenientes con el abastecimiento de algunos reactivos, con insumos de laboratorio y de medicamentos, situación en la que se trabaja.
Se consultó al Hospital Roosevelt sobre la deuda con los proveedores de alimentos y Comunicación Social respondió que ya se comenzó a hacerles efectivo el pago.