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La contaminación del aire en Guatemala supera 9 veces la aceptable por la OMS
Dos expertos explican las condiciones que ocurren respecto a la calidad del aire, y cómo no solo el incendio en el botadero de Amsa son las causas de este problema ambiental.
El incendio en el vertedero de Amsa ha empeorado la calidad del aire de la Ciudad de Guatemala y otros municipios en el área metropolitana. Esto se suman a otras condiciones como los incendios forestales y la contaminación producida por vehículos e industrias. (Foto Prensa Libre: Byron Baiza).
El índice de Calidad del Aire (ICA) y contaminación del aire PM2.5 en Ciudad de Guatemala, según la empresa suiza IQAir, para el 9 de abril a las 15 horas, “es perjudicial para grupos sensibles”, según los mapas que publican en su sitio oficial.
“La concentración de PM2,5 en Ciudad de Guatemala es actualmente 8.9 veces superior al valor guía anual de calidad del aire de la OMS”, exponen.
Lo anterior lo hacen en medio del incendio que ocurre en el vertedero del kilómetro 22, ruta al Pacífico, y que está a cargo de Amsa. Pero dos expertos aseguran que hoy es coyuntural, pero la calidad del aire en el país atraviesa por serios problemas desde hace muchos años.
El índice por ahora es de 123 ICA - EE.UU., y el contaminante principal es el PM2.5, que significa la “concentración de material particulado, de 2.5 micrómetros de diámetro por metro cúbico”.
Las estaciones de monitoreo de calidad del aire ubicadas en la Ciudad de Guatemala, según el departamento de investigación y servicios hídricos, sección de calidad de agua y aire, del Instituto Nacional de Sismología, Vulcanología, Meteorología e Hidrología (Insivumeh), reportan una categoría “muy mala”, según el Índice de Calidad del Aire (ICA) correspondiente a la metodología de la Agencia de Protección Ambiental de los Estados Unidos (EPA).
Por lo anterior, indica el Insivumeh, “la calidad del aire puede ser dañina a la salud”, en estos momentos.
De acuerdo con la información del Insivumeh el ICA es una regla que va de 0 a 500 y establece que cuanto más alto es el valor del Índice, mayor es el nivel de contaminación atmosférica.
“Éste permite incorporar en un único índice las concentraciones de los contaminantes de criterio”, revelan.
Las dividen de esta forma: Ozono troposférico (O3); material particulado (PM10 y PM2.5); monóxido de carbono (CO); dióxido de azufre (SO2) y dióxido de nitrógeno (NO2).
El ICA se divide en seis categorías, indica el Insivumeh, según el nivel de afectación a la salud humana.
Las categorías son verde, de 0 a 50, buena; moderada, de 51 a 100, moderada; anaranjada, 101 a 150, dañina para la salud (grupos sensibles); y roja, de 151 a 200, dañina para la salud. Además, púrpura de 201 a 300, muy dañina para la salud y marrón, de 301 a 500, peligrosa.
Aunque en el caso que ocurre ahora no solo influye el incendio en el vertedero de Amsa, también se toman en cuenta los incendios forestales activos, y que aparecen también en los monitoreos de la empresa suiza y el propio Insivumeh.
El especialista en temas del medio ambiente y clima, Claudio Castañón, explica que la calidad del aire ha tenido un efecto mediático por el incendio del basurero, no obstante, la calidad ha sido más crítica en otros momentos.
Como muchos temas ambientales la “calidad del aire” está teniendo una atención mediática importante
— Claudio (@gtClaudio) April 9, 2024
Pero la calidad ha sido más crítica en otros momentos, en el último año estación Insivumeh z.13 registró un máximo para PM2.5 la madrugada del 25 de dic, y para PM10 el 11 de ene pic.twitter.com/Q0LRdCNyDp
Por ejemplo, expone, en el 2021, la estación Insivumeh de la zona 13 registró un máximo para PM2.5 la madrugada del 25 de diciembre, y para PM10 el 11 de enero, ambos en el año pasado.
Castañón comenta que hay otros puntos complicados que “en principales rutas se tiene un pico cerca de las 7 horas y “no es algo nuevo - pero ahora más extremo-, porque monitoreos anteriores de la Facultad de Farmacia Universidad de San Carlos (Usac), han concluido que se requiere “implementar un reglamento de Emisiones Vehiculares”.
Los especialistas consideran que en el caso del contaminante PM 2.5, que son partículas finas con menos de 2.5 micrómetros de diámetro, pueden llegar hasta los alvéolos pulmonares. Estas son emitidas, principalmente, por procesos de combustión de vehículos e industrias, quema de residuos sólidos y pirotécnicos.
Mientras que el contaminante PM10, son partículas sólidas o líquidas suspendidas en la atmósfera con menos de 10 micrómetros de diámetro y son emitidos, principalmente, por la resuspensión de polvo de calles no pavimentadas, erosión de suelo y aerosol marino.
Sebastián Charchalac, doctor en ingeniería ambiental de la División de Ciencias de Ingeniería de Centro Universitario de Occidente (Cunoc) de la Usac, comenta que los mapas que se muestran en los sitios web consultados son “estaciones que miden ese parámetro que se llama PM 2.5, que indica la cantidad de partículas que hay en el aire”.
“Lo que vemos nosotros es que, de pronto, algunas estaciones en la Ciudad de Guatemala están ya en nivel naranja o rojo. Esto quiere decir que hay una alta presencia de partículas en el ambiente”, explica Charchalac.
¿Y de dónde vienen esas partículas? Reflexiona. Por ejemplo, explica Charchalac, algunas de las fábricas, del esmog que generan los vehículos. Si hay erosión, si hay viento, eso hace que haya mucha más partícula en el aire, explica.
“Todos esos factores afectan la presencia de las partículas en el ambiente como tal, pero en este caso lo que se observa es de que hay algunos puntos donde hay niveles por encima ya del código anaranjado”, expone.
El especialista indica que, debido a las condiciones actuales, por el incendio del vertedero, ha habido un aumento en los niveles del ICA. “Muchas de las estaciones están en naranja y algunas han llegado al rojo.
“Eso es perjudicial y se deben tomar las precauciones necesarias”, manifiesta.
Charchalac explica que “vale la pena notar es que en la Ciudad de Guatemala ya es muy común que se tenga en el nivel naranja en cuanto a la calidad del aire. Ahora la excepción es que está en el rojo por las circunstancias actuales”.
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Un reporte del “Air Quality Life Index”, redactado por la Universidad de Chicago en 2023 estableció que Guatemala era la ciudad con peor calidad de aire en Latinoamérica. Lo comparan con ciudades famosamente contaminadas como Pune, India y Harbin y China.
Para el análisis usaron datos de PM2.5, obtenidos en forma satelital y comparan la contaminación del aire en diferentes países y ciudades de todo el mundo.
Además, correlacionaron la diferencia entre los datos de contaminación de la ciudad y los límites recomendados por las guías internacionales de la Organización Mundial de la Salud con “los años de esperanza de vida perdidos” de la población que habita en esos países y ciudades.
El Laboratorio del Aire de la USAC, ha documentado que la causa principal de la contaminación del aire, por mucha diferencia, es la carga vehicular.
“El tráfico causado por los más de 4.6 millones de vehículos en el país, de los cuales muchos están en mal estado”, cita Rodolfo Girón, gerente general en Laboratorio Ecológico y Químico, S. A en una publicación en su sitio web.
Charchalac, coincide con Castañón, en que se hace necesario crear reglamentación de emisiones vehiculares, pero además, controlar la quema de basura, y de otros componentes, que en la actualidad se hacen sin control alguno.
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