análisis
|Suscriptores
La economía cerró el primer semestre según lo esperado, pero eso podría cambiar en el segundo
A excepción de la inflación, la estabilidad macroeconómica se ha mantenido en Guatemala, pero expertos enumeran los posibles riesgos en el resto del año.
La interrupción en la Autopista Palín Escuintla y otros daños a la infraestructura por las lluvias podría influir en la economía, según analisitas. (Foto Prensa Libre: Óscar Vásquez)
La economía guatemalteca ha mostrado estabilidad durante el primer semestre del año, y los indicadores de corto plazo muestran un desempeño que se mantiene en la línea de lo proyectado, a pesar de un contexto internacional volátil.
Las autoridades de la banca central, y analistas consultados por Prensa Libre, hacen un repaso de lo ocurrido en el primer semestre, las expectativas para el cierre del año y lo que se prevé para 2025.
CONTENIDO PARA SUSCRIPTORES
Álvaro González Ricci y José Alfredo Blanco Valdés, presidente y vicepresidente del Banco de Guatemala (Banguat) y de la Junta Monetaria (JM), así como Johny Gramajo, gerente económico, dieron a conocer el pasado 26 de junio el panorama a esa fecha:
El crecimiento económico previsto como escenario central para 2024 sigue siendo de 3.5% que es la estimación más plausible y de 3.7% para 2025, cifra que está por arriba del crecimiento potencial, que solo es de 3.5%.
De acuerdo con el índice mensual de la actividad económica (Imae), la producción creció 3.8% en abril (último dato disponible) y entre enero y ese mes, creció 3.5%, lo que es congruente con el crecimiento esperado para fin de año. Ese entorno ha sido acompañado por márgenes de confianza elevados, ya que el índice de junio se ubicó en 70.64 puntos, muy por encima de los 50 puntos que es la zona de expansión.
El crédito bancario al sector privado muestra una tasa de crecimiento de 15.6%, una cartera de crédito que sumaba Q359 mil 308 millones, en la que predomina el crecimiento de los préstamos destinados al consumo (alza de 22.2%), seguidos de los créditos empresariales con un alza de 14.4%; créditos productivos, con 9.5%; y préstamos hipotecarios, con un incremento de 7.2%.
"La producción creció 3.8% en abril (último dato disponible) y entre enero y ese mes, creció 3.5%, lo que es congruente con el crecimiento esperado para fin de año"
Johny Gramajo, gerente económico Banguat
En cuanto a las remesas a mayo registraron un crecimiento del 7%, y aunque mantienen una desaceleración, se anticipa que en 2024 se estarían recibiendo unos US$21 mil 685 millones -unos Q168 mil millones- y en 2025, alrededor de US$22 mil 986 millones -Q178 mil 141 millones-, recursos que son fundamentales para el crecimiento económico del país por el lado del gasto.
Respecto a la inflación, a mayo se ubicó en 3.76% y se estima que al finalizar el presente ejercicio y en diciembre del 2025 se ubique en 4%, que es el valor central de la meta establecida por las autoridades monetarias (4% +/-1%), pues las expectativas a 12 meses son de 3.97% y a 24 meses, de 3.99%.
Ello, a pesar de serias dudas manifestadas por analistas privados, en cuanto al nuevo método de cálculo del Índice de Precios al Consumidor IPC), reportado cada mes por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
Aspectos a considerar
Sergio Recinos, expresidente del Banguat, y Paul Boteo, director ejecutivo de la Fundación Libertad y Desarrollo, brindaron sus apreciaciones con respecto a la evolución productiva en el primer semestre y lo que se esperaría en el corto plazo.
Recinos explicó que en general, el primer semestre del año estaría cerrando conforme lo estimado por la banca central y la inflación se ubicaría dentro de la meta mencionada. No obstante, existen al menos dos riesgos importantes para el crecimiento económico, que también impactaría en el nivel general de precios, en el segundo semestre:
CONTENIDO PARA SUSCRIPTORES
El primero, una baja en las exportaciones que podría agravarse por los problemas asociados a los puertos y a las interrupciones de locomoción en las carreteras. Y el segundo, es el posible aumento de precios de los alimentos, sobre todo los provenientes de la agricultura, derivados inicialmente por el retraso del invierno y luego, los daños ocasionados por las intensas lluvias. Esto, agravado por la escasa velocidad de respuesta gubernamental.
“El índice de confianza de la actividad económica, de alguna manera, empieza a reflejar esta situación, ya que prácticamente muestra un estancamiento a junio”.
Para Boteo, la economía de Guatemala se recuperó en el primer semestre, luego de la pronunciada desaceleración que sufrió en el último trimestre del año pasado: en los primeros tres trimestres de 2023 la economía creció 4%, pero en el cuarto trimestre solamente lo hizo en 2%, debido a la caída de 5.3% de las exportaciones (volumen, medido en cuentas nacionales) y el desplome de 9.5% en los gastos de consumo final del gobierno. Esto último, asociado a la crisis política que atravesó el país en los meses previos a la toma de posesión.
“En el primer trimestre de 2024, el Imae registró un crecimiento promedio de 3.4% y en abril se incrementó a 3.8%. La expectativa es que los primeros dos trimestres del año cierren con un crecimiento del producto interno bruto (PIB) cercano al 3.5%, lo que estaría alineado con el crecimiento potencial de la economía de Guatemala”.
CONTENIDO PARA SUSCRIPTORES
El analista destaca que el crédito al sector privado en dólares ha revertido la tendencia a la baja que registró en el segundo semestre de 2023: en octubre del año pasado cayó 3.3% en términos interanuales, pero en el primer semestre de 2024 se registró un crecimiento interanual promedio de 7.1%. En tanto, el crédito en quetzales ha sido mucho más estable en el último año y ha seguido con esa dinámica durante el primer semestre del año, registrado un crecimiento promedio de 19.8%
“Otro aspecto positivo es que la inflación ha estado dentro del rango meta del banco central en los primero seis meses del año, lo que se debe a cierta estabilidad en el precio internacional de las materias primas, lo cual ha contribuido a reducir las presiones inflacionarias locales”.
“Persisten los riesgos”
Los analistas dieron una visión de lo que pueda ocurrir en el siguiente semestre en los indicadores clave:
Recinos indicó que hay que prestarle atención a la inflación, las exportaciones, el índice de confianza de la actividad económica, el ingreso de remesas familiares, el crédito bancario al sector privado, el precio del petróleo y a lo que suceda con la tasa de interés de la Reserva Federal (Fed) de Estados Unidos. “Estos dos últimos factores porque tienen implicaciones importantes para la actividad económica a nivel mundial, incluyendo a Guatemala”.
"El primer semestre del año estaría cerrando conforme lo estimado por la banca central y la inflación se ubicaría dentro de la meta mencionada. No obstante, existen al menos dos riesgos importantes para el crecimiento económico, que también impactaría en el nivel general de precios"
Sergio Recinos expresidente del Banguat
El directivo de la Fundación Libertad y Desarrollo indicó que la perspectiva en los próximos meses es que el ritmo de crecimiento de la economía se mantenga en alrededor de 3.5%; el crecimiento de las remesas se ha mantenido en los últimos 18 meses, lo que ha contribuido a que la demanda interna se “normalice”.
“Sin embargo, es posible que la inflación registre un alza en los próximos meses, sobre todo en alimentos, por los efectos del clima”, pues el daño a las cosechas y la infraestructura podría provocar incrementos de precios que podrían llevar la inflación a cerca del 6% en los próximos meses “y el banco central no podría hacer nada, dado que el incremento se debería a un shock de oferta e incremento en los costos de transporte de bienes”.
Por último, llamaron la atención hacia el sector exportador, pues en el 2023 las ventas al exterior cayeron 2.5% y en los primeros cuatro meses de 2024 se registró una baja de 4.3% en el monto total, respecto al mismo período del año anterior. Si bien los precios promedio de los productos de exportación registran un incremento de 9%, el volumen total vendido disminuyó 12.2%.
A esto se suman el daño en la infraestructura, las largas esperas en los puertos y el daño a ciertos cultivos exportables, por lo que se pueden esperar meses difíciles para varios sectores exportadores.
Perspectivas 2025
En cuanto a las perspectivas 2025 para la economía guatemalteca, se espera que se comporte muy similar al 2024 con un crecimiento de 3.2%; sin embargo, los principales socios comerciales de Guatemala tendrían un desempeño menor, lo que podría implicar menos demanda de los productos de exportación y por ende, repercutir en el crecimiento económico del país.
"La inflación ha estado dentro del rango meta del banco central en los primero seis meses del año, lo que se debe a cierta estabilidad en el precio internacional de las materias primas, lo cual ha contribuido a reducir las presiones inflacionarias locales"
Paul Boteo, director ejecutivo de la Fundación Libertad y Desarrollo
Y habrá que estar atentos a lo que suceda en materia de los conflictos geopolíticos ya que ello podría elevar el precio del petróleo y consecuentemente aumentar los precios de algunos productos en el mercado internacional.
Así mismo, se sugiere prestar atención a las elecciones en Estados Unidos en noviembre del presente año, ya que dependiendo de lo que suceda, se podría afectar el ingreso de divisas por remesas familiares.
Como un factor positivo, los especialistas mencionan que la inflación en Estados Unidos podría seguir bajando, por lo que la Fed bajaría las tasas de interés y con ello, estimular el crecimiento económico al reducir los costos de financiamiento.
CONTENIDO PARA SUSCRIPTORES
Por otra parte, hay que esperar lo que sucede con el presupuesto general de ingresos y egresos del Estado para 2025 (en caso de que se apruebe), no solo en cuanto a su monto global, sino a su composición entre gasto corriente e inversión, así como su déficit fiscal, ya que de ello dependerá qué tan efectiva podrá ser la política fiscal; asimismo, a la reacción que pudiera tener la autoridad monetaria respecto a la tasa de interés interna.
Por último, la perspectiva es que el próximo año, el gobierno tenga mejores indicadores de ejecución presupuestaria y se pongan en marcha mayores proyectos de infraestructura, que podrían ayudar al desempeño de la economía.
Cacif: Se debe impulsar la inversión y el empleo con reglas claras
Al consultar a Carmen María Torrebiarte presidenta del Comité Coordinador de Asociaciones Agrícolas, Comerciales, Industriales y Financieras (Cacif), indicó que durante el primer semestre “hemos podido ver que la economía guatemalteca ha demostrado ser muy resiliente”.
Resaltó que sobresale que se ha ido recuperando la confianza en la actividad económica y los agentes económicos o, mejor dicho, las personas, han ido retomando sus actividades productivas con normalidad. Asimismo, las condiciones macroeconómicas han demostrado ser robustas: tanto la inflación como el tipo de cambio se han mantenido estables.
CONTENIDO PARA SUSCRIPTORES
Pero también señaló que ven con preocupación los atrasos en la inversión en infraestructura pública, pues “esta sigue deteriorándose y, como consecuencia, perdemos competitividad en los mercados globales. Las exportaciones guatemaltecas han disminuido consistentemente por más de un año. Sabemos que la situación internacional no es favorable, pero si seguimos perdiendo competitividad, será cada vez más difícil recuperar nuestra posición externa”.
En cuanto a la perspectiva del segundo semestre, la presidenta del Cacif, subrayó que un primer tema a considerar respecto a las expectativas para fin de año es la situación externa. “Para noviembre, se esperan elecciones en Estados Unidos, lo cual crea un período de incertidumbre en nuestro principal socio comercial”.
Sin embargo, enfatizó que, en la situación interna, tres temas son fundamentales para mantener una expectativa optimista y poder salir de la tendencia de crecimiento en la que nos encontramos:
- Es fundamental acelerar la inversión en infraestructura: carreteras, puertos y aeropuertos porque en los tres hay serios desafíos.
- Atraer mayores niveles de inversión extranjera, lo que depende de las condiciones generales de competitividad, entre ellos nuevamente la misma infraestructura, “pero también que somos un país amigable y respetuoso de los inversionistas. Reglas claras y estables son fundamentales”.
- Fortalecer el mercado laboral porque se tiene una oportunidad promoviendo el trabajo de tiempo parcial, pero se necesitan reglas claras y acordes a la realidad guatemalteca, pues cambios discrecionales y arbitrarios en las condiciones laborales alejan tanto la inversión extranjera como la nacional. “Necesitamos predictibilidad en la resolución de conflictos laborales y en la fijación del salario mínimo”.
Torrebiarte concluyó con que el país necesita un ecosistema amigable a la inversión para generar más empresarialidad y más empleo. “Cómo consecuencia, habrá mayor crecimiento económico y menos pobreza en Guatemala”.