Mynor Leiva, administrador de la aduana de la frontera El Carmen, dijo que hace tres semanas se reunieron con autoridades aduaneras en Ciudad Hidalgo, Chiapas, México, quienes informaron sobre la acción que se tomará a partir de enero, la cual consiste en la restricción de paso en la aduana Talismán, del lado mexicano.

Explicó que por esta disposición mexicana los migrantes nacionales o centroamericanos que deseen ingresar en el país únicamente podrán hacerlo por Ciudad Hidalgo, Chiapas, México, por el puente Suchiate II, y por Tecún Umán, San Marcos.

Comerciantes de Tecún Umán señalaron que concentrar en esa aduana el ingreso de los migrantes que transportan vehículos rodados creará caos y dejará pérdidas millonarias en el área de El Carmen.

Pérdidas económicas

Negociantes afectados dijeron que la principal actividad económica de la población de El Carmen tiene que ver con el ingreso de vehículos en la zona, sobre todo durante el fin de año.

Agregaron que en este sitio se prestan servicios de restaurante, hoteles, predios para estacionamientos y gestores aduanales, y cambistas de divisas obtienen el pan diario con el trabajo que hacen con los migrantes.

“Estamos preocupados porque en la frontera mexicana Talismán han restringido el paso a migrantes, que en estos días están llegando para pasar las fiestas de fin de año con sus familiares”, expresó Leiva.

Datos de las autoridades revelan que el movimiento de migrantes por esta frontera es considerable, sobre todo en las fiestas de fin de año.

En los primeros 11 días de diciembre se reporta un ingreso aproximado de tres mil transmigrantes y se espera que al 24 de diciembre el número pueda llegar a los cinco mil o seis mil.

Según comerciantes, los migrantes prefieren la frontera de El Carmen porque encuentran precios muy favorables en todos los servicios, y eso se traduce en mejor economía para el lugar.

Preocupados

Alicia López, de una oficina de gestión aduanera, aseguró que la comunidad vive de los ingresos que perciben de los transmigrantes, por los distintos servicios que prestan, pero a partir de enero no saben de qué forma podrán trabajar.

Esteban Rivera, un hotelero, indicó que la restricción en la frontera Talismán afectará en todo sentido, porque ellos sobreviven de los ingresos que los migrantes generan por hospedaje y alimentación.

Eulogio Figueroa, propietario de un restaurante, advirtió de que se avecina una crisis económica para miles de personas que dependen directa e indirectamente del ingreso por la frontera El Carmen.

Francisco Melgar, dueño de un predio, comentó que con la restricción mexicana su negocio se irá a la quiebra, pues cobra por los días que los vehículos permanecen en la frontera mientras se autoriza su entrada.

Los afectados dijeron que es necesario que las autoridades guatemaltecas intercedan ante las mexicanas, a fin de que den marcha atrás a la disposición de cerrar el paso de vehículos en la frontera Talismán.

Prensa Libre trató de conocer la versión de la Embajada de México en Guatemala, pero al cierre de la edición no había respondido las interrogantes que se le plantearon.