El ministro de Gobernación, Mauricio López Bonilla, dijo que lo importante era contratar una empresa en EE. UU. para que imprima durante un período corto.
“Quién se va a meter a una licitación para que nos imprima en ocho meses los pasaportes. Eso lo que necesitamos ahora. Si el proceso de licitación se va a llevar seis meses es un traslape de tiempo y ahí está el meollo del asunto”, expuso López Bonilla.
Viana afirmó que recuerda que en mayo último se le ofreció a un israelí de apellido Roitman el proyecto de la emisión de pasaportes, pero aclaró que el contrato se firmó con Jorge Ignacio Dinermman, presidente de esa empresa en Miami, Florida.
López Bonilla refirió que el proyecto se adjudicó por la presa en pasaportes que se deben entregar. Antes “imprimíamos aquí y empezamos a enviarlos a través de valija diplomática, pidiendo permiso al Gobierno de EE. UU.”, indicó el ministro.